Sobre dos riberas, en un mar de encinas se alza la casa. Un enclave privilegiado desde donde el visitante puede disfrutar del típico paisaje de dehesa charra. La Casa está rodeada de un coqueto jardín y dos porches, uno al aire libre y otro acristalado, totalmente amueblados para su confort. La piscina, las mesas de piedra, columpios y otros pequeños detalles favorecen la comodidad durante su estancia.
El interior de la vivienda está distribuido en dos plantas. La planta baja de 420 m2 consta de un cuarto de estar con chimenea y TV, un comedor para veinte personas, dos amplios salones, una cocina totalmente amueblada, con despensa, y un precioso office con chimenea, cinco dormitorios exteriores, con sus baños individuales, y otros muchos rincones que sorprenderán al inquilino.
A la planta superior se accede por una singular escalera de caracol construida en madera. Los 45 m2 de esta planta se dedican íntegramente a una suite con su dormitorio doble, cuarto de estar y baño completo. Toda la planta superior tiene calefacción regulable e independiente del resto de la casa.
Los letreros de las habitaciones hacen referencia a nombres de vacas bravas que por una cosa u otra han destacado en nuestra ganadería.
- Precio medio aproximado por persona/noche: es una media global de nuestro alojamiento, si estás interesado en tarifas exactas, ¡contáctanos!