Casa da Pastora

No sabemos exactamente cual es la antigüedad de la casa, la primera referencia válida que tenemos data del 1880, año de nacimiento de Rosa, la madre de María “A Pastora”.
A finales del siglo pasado se restauró totalmente la casa, la premisa era adaptar las diferentes estancias inicialmente diseñadas como vivienda familiar, a las modernas exigencias del Turismo Rural, y así nació Casa da Pastora, un lugar concebido para relajarse y disfrutar de la tranquilidad de un entorno rural, con todas las comodidades y servicios.

La casa cuenta con ocho habitaciones dobles con baño individual y calefacción, cada una tiene su encanto, son todas diferentes y tienen los nombres en gallego de antiguos oficios, la mayoría desaparecidos, y relacionados con la vida cotidiana que se desarrollaba antaño en las zonas rurales de Galicia.
La decoración se ha realizado con parte de muebles restaurados, objetos antiguos y objetos de hoy día en una mezcla exquisita, se ha cuidado al máximo el detalle y la armonía de toda la casa.

El exterior de la casa se acaba de reformar por completo con la instalación de una piscina cubierta que se abre totalmente al jardín, y desde la cual se obtienen unas vistas privilegiadas del entorno que rodea la casa. Se ha rediseñado el jardín intentando aportar valor por medio de la incorporación de materiales reciclados, algunos de la misma casa, vigas de madera, losas de granito, mármoles... e instalando duchas solares, jardineras, iluminación led, etc. Hemos cuidado y recuperado los árboles más representativos de la finca, los castaños, la higuera, el olivo, además de la viña y las plantas aromáticas y ornamentales.
En el antiguo pajar se ubica actualmente la terraza, un lugar ideal para desayunar, charlar o disfrutar de un aperitivo, que también hemos reformado haciéndola accesible e instalando un baño adaptado.

El cubierto donde se guardaba el carro de las vacas y los aperos de labranza, sigue cumpliendo en parte su cometido inicial ya que hoy día es el parking.