Casa Chocolate

Casa de ensueño

Katy Parra

Hemos alquilado el apartamento para 2 personas y es precioso, tiene absolutamente de todo. Te hace sentir como en tu propia casa. El entorno es inigualable. Repetiremos seguro.

Una casa deliciosa.

Mónica

Pasamos el fin de semana 4 parejas, aunque cogimos la casa completa para disfrutar de la barbacoa y terraza de la tercera planta también. Fue espectacular! Todo muy bien equipado, limpio, con detalles de iluminación y decoración de muy buen gusto. Las camas, fabulosas, de lo más confortable que hemos probado. Es cierto que el salón de la planta baja se queda un poco justo de espacio para estar todos juntos, pero 8 caben perfectamente, al igual que en torno a la mesa de comedor. Además tiene un porche bajo una parra y sillas plegables para sacar y tomar el aperitivo.

Vistas muy bonitas, pero la casa y el servicio dejan mucho que desear

Maria Paredes

No tiene la capacidad para las personas que dice, pueden "dormir" 10, pero no "estar" cómodamente. El salón es pequeño, hay demasiados muebles y adornos, que efectivamente dan encanto a la foto, pero recargan el espacio, 6 personas es una multitud. En la mesa grande comen 8 incómodos. La cocina está pobremente equipada y por cada cápsula de café piden 0,50c, precio extra que no se especifica en la web donde se anuncia. Problemas con el agua caliente, hubo gente que se duchó con agua fría. No pudimos conectarnos al wifi, no nos dieron solución. No había encendedor para la chimenea y tampoco nos lo proporcionaron, de puro milagro uno de nosotros llevaba uno pues somos un grupo de no fumadores. No pudimos usar la barbacoa porque eso pertenece al apartamento de arriba que además de ser independiente de la casa, ya estaba alquilado. Además de que cobran 3€ extra por cada barbacoa, tampoco especifican esto en la web, te lo encuentras una vez estás allí en información adicional. Intentamos usar una plancha para cocinar pero estaba estropeada, tampoco nos dieron solución así que  tuvimos que cocinar 4 kg de carne en 2 sartenes pequeñas. Los dormitorios son espaciosos y las camas muy cómodas pero no hay dónde poner la ropa. Juegos de toallas escasos: una toalla de ducha y una de bidé por persona. La ducha de hidromasaje no da masaje porque el agua no tiene presión. Muy estética, eso sí. En el sofa cama del salón no se pudo dormir, hubo que hacerlo en el suelo porque la colchoneta era finísima y el canapé estaba lleno de hoyos.  El inodoro japonés como reclamo publicitario es perfecto, pero al no tener instrucciones no se pudo usar por temor a estropearlo al tocar el botón equivocado. Sin duda la ubicación está muy bien, las vistas muy bonitas, pero la casa deja mucho que desear. 

No te la puedes perder

Silvia Navarro

Estuvimos tres días entre semana y no pudimos haber escogido mejor apartamento ni localización. Un remanso de paz, unas vistas impresionantes y una casa a la que no le falta detalle para desconectar de la rutina y disfrutar de las cosas importantes de la vida, como son la familia y la naturaleza ( ente otras ;P ) . Muchas gracias