El Parque Natural de los Valles Occidentales se encuentra en la Jacetania y forma parte de la frontera aragonesa con Navarra y Francia. Su situación da lugar a un clima de influencia atlántica que favorece la existencia de bosques mixtos, grandes pastos de altura, hayedos, abetales y pinares. En sus tierras húmedas y frescas habitan animales como el oso, el quebrantahuesos, el milano real, la nutria o el pico dorsiblanco, característico de la zona.
Las elevadas cumbres de la zona albergan glaciares, ibones, ríos, bosques y selvas, con ejemplos naturales como los bosques de Gamueta, la Selva de Oza, Linza, Aguastuertas, los Valles de Hecho y Ansó o el pico Bisaurín. Además, el entorno ofrece rutas, caminos, senderos y barrancos ideales para la práctica de actividades deportivas.
Los Valles Occidentales conservan su historia y la muestran a través de sus construcciones megalíticas, de su calzada romana utilizada por los peregrinos del Camino de Santiago desde la Edad Media y del Monasterio de San Pedro de Siresa.
