Torla es una localidad oscense situada en el Pirineo Aragonés, en la comarca del Sobrarbe, que se asienta sobre el valle glaciar del río Ara. Es puerta de acceso al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido y al Valle de Broto y parte de su municipio se encuentra dentro del Monumento natural de los Glaciares Pirenaicos.
Torla es un pueblo típico del Pirineo, en una posición privilegiada que le concede paisajes espectaculares. Es punto de acceso a la pista forestal que conduce a Bujaruelo y se encuentra rodeada por cinco imponentes picos de más de 2.000 metros de altura, entre los que destaca el Mondarruego (2.848 m.).
En su entorno natural pueden realizarse excursiones y deportes de aventura como el barranquismo, el senderismo y el rafting en el río Ara, uno de los últimos ríos vírgenes del Pirineo.
En la ciudad puede contemplarse la arquitectura tradicional altoaragonesa de sus casas, entre las que destaca el Casón de los Viu (siglo XIV). Con una historia de aislamiento y cultura propia, Torla conserva en la actualidad tradiciones como el carnaval, la jota, el paloteao y la Danza del Rapatán, exclusiva de la villa.