La ermita de San Saturio está situada en la ciudad de Soria, en la provincia homónima, comunidad autónoma de Castilla y León, en España.
Es considerado popularmente, en su enclave paisajístico, uno de los parajes más bellos que posee la ciudad.
A la ermita se accede por la cueva situada a sus pies, origen de la tradición santera. En un primer término, se encuentra la sala de reuniones del llamado Cabildo de los Heros, una especie de Tribunal de las Aguas para el secano donde celebraban sus juntas la hermandad de labradores. La sala posee una delicada bancada de piedra y una efigie del santo colocada en el lugar de honor.
Por una escalera adosada a la roca se sube a las dos salas capitulares, desde cuyos balcones se contempla el bello panorama de las orillas del Duero. En la sacristía en un retablo barroco se encuentra un Cristo Crucificado de gran tamaño.
La iglesia es de planta octogonal muy alargarda, cubierta con cúpula de ocho plementos y linterna. En los frescos de sus paredes está representada la historia de San Saturio empezando por el lado del Evangelio. En dos de los lienzos, se puede contemplar la silueta del castillo de Soria, tal como estaba antes de su destrucción. Además en el retablo mayor barroco se cuentra su relicario del siglo XVII.
En la cúpula, con linterna, frescos con representaciones de santos ermitaños, entre ellos San Juan Bautista, San Juan Evangelista, San Benito y el propio Jesucristo en el desierto. Esta obra fue realizada por Antonio Zapata entre los años de 1704 y 1705, el pintor soriano barroco más destacado, discípulo de Antonio Palomino.
Su fiesta, se celebra con una romería, el 2 de octubre.