La Ruta de los Pueblos Blancos es un itinerario que transcurre por municipios de las provincias de Cádiz y Málaga. Atraviesa zonas montañosas de enorme valor natural como la Sierra de Grazalema, la Serranía de Ronda y los Alcornocales y descubre rincones de gran belleza que junto al color blanco de las casas encaladas dan lugara un mosaico único.
Naturaleza, historia, arte, cultura, artesanía, tradición, gastronomía... El itinerario es idóneo para adentrarse en Andalucía y empaparse de sus costumbres. Núcleos como Arcos de la Frontera, Medina-Sidonia, Ronda, El Bosque, Villaluenga del Rosario, Grazalema, Zahara de la Sierra y Olvena atrapan al visitante y lo trasladan a diferentes épocas, con huellas destacadas de tiempos romanos y de la espectacular al-Ándalus.
La Ruta de los Pueblos Blancos ofrece un abanico muy amplio de posibilidades para el turismo, sin olvidar el turismo activo a través de la propia ruta y de deportes de aventura en su entorno natural. El turismo gastronómico está protagonizado por productos de primer nivel como el aceite de oliva y el vino con Denominación de Origen, las carnes de caza, pescados y mariscos, embutidos, membrillo, queso y repostería.