En el extremo más meridional de la provincia, el río Duero y sus principales tributarios, vertebran una amplia depresión donde laderas onduladas, fértiles vegas, terrazas y extensos páramos dibujan un paisaje de contrastes inesperados, rico en matices, que nos permite disfrutar de perspectivas sorprendentes. Es la Ribera del Duero, una tierra conocida por sus antiguos, nobles y afamados vinos.
Al adentrarse en tierras burgalesas, el río Duero se sosiega, se agranda y conforma una amplia vega, fluyendo entre sembradíos, cuestas y colinas cubiertas de viñedos. La Ribera de Duero Burgalesa es una comarca geográficamente bien definida, delimitada por las provincias de Palencia, Valladolid, Segovia y Soria, la Tierra de Pinares y el Valle del Arlanza.