La ciudad de Palos de la Frontera es un municipio español situado en la provincia de Huelva (Andalucía). En el año 2013 contaba con 10.196 habitantes (INE) y una densidad de población 203,92 hab/km².
La economía de la ciudad dependió tradicionalmente de las labores del mar, tanto pesqueras como de comercio. Pero debido a la emigración hacia las tierras americanas y poblaciones limítrofes, la flota pesquera y comercial fue desapareciendo casi por completo, con lo que el municipio dejó de lado el mar y se dedicó a las labores agropecuarias. Desde el último tercio del siglo XX el principal motor económico es el cultivo y recogida del fresón, siendo exportado el producto a gran parte de la Unión Europea. Además en el término municipal se encuentra implantada una importante cantidad de fábricas e industrias, dedicadas a actividades como el refino de petróleo para la producción de combustibles, o el almacenamiento y regasificación de gas natural licuado.
Si bien existen vestigios de poblamiento en la zona desde el Paleolítico superior, Palos de la Frontera nace, documentalmente hablando, a comienzos del siglo XIV, cuando Alfonso XI de Castilla la dona a Alonso Carro.
La historia de esta ciudad está íntimamente ligada a las labores marítimas y a los descubrimientos geográficos. Es por esto que Palos de la Frontera es conocida como la cuna del Descubrimiento de América (como afirma en su escudo), ya que en esta ciudad se gestó y se preparó el primer viaje de Cristóbal Colón hacia las Indias. Zarparon del puerto de esta ciudad el 3 de agosto de 1492, llegando el 12 de octubre de dicho año a una isla del actual continente americano, que por entonces era desconocido por los europeos.
Por ello, Palos forma parte del itinerario histórico artístico conocido como los Lugares colombinos. En la actualidad se está culminado el proceso para la declaración de los Lugares Colombinos como Patrimonio de la Humanidad.