El paraje natural de la desembocadura del río Guadalhorce es un espacio natural protegido. Se trata de un pequeño paraje de marismas de 67 ha. al sur de la ciudad, donde el río Guadalhorce se bifurca en dos brazos, formando un delta aluvial en el que se encuentran algunas pequeñas lagunas de origen artificial.
Entre la flora se encuentran plantas acuáticas, vegetación perilagunar de carrizos, castañuelas y almajos principalmente. Las márgenes del río están ocupadas por álamos, eucaliptos y sauces. También se encuentran tarajes y palmeras.Contiene una rica y variada fauna de aves, reptiles y anfibios. Entre las aves destacan el morito, el flamenco, la espátula, la cigüeña negra (de paso), la gaviota de Audouin, el martín pescador o la pagaza piquirroja, además de otras más comunes como garcillas, pardelas, charranes, fochas, anátidas, etc. Los mamíferos más comunes son el conejo, los micromamíferos (musaraña gris, ratón de campo,rata de agua, topillo común, lirón careto) comadrejas, turones y zorros.
La Desembocadura del Guadalhorce fue probablemente usada en la antigüedad como puerto natural por los fenicios, como sugiere el yacimiento arqueológico del Cerro del Villar, situado en la margen Oeste, a 500 m. del mar. [Wikipedia]