El pequeño enclave de los Escullos constituye la población más cercana a esta playa.
Llegamos aquí desde el Pozo de los frailes, tras contemplar su famosa noria. Una carretera sinuosa nos acerca a esta parte del litoral caracterizada por su horizontalidad.
La Playa del Arco ocupa el centro del admirable fondeadero de Los Escullos, presentándonos una superficie de finas arenas de unos 750 m. de longitud y una anchura media de 50 m.
Su acceso está perfectamente señalizado y se realiza con comodidad.
Nos encontramos en un lugar aislado de las masivas afluencias de veraneantes con una magnífica playa delimitada, en uno de sus extremos, por una duna fósil de aspecto petrificado y formas curiosas debido a la erosión.
En sus cercanías existen algunos establecimientos hosteleros donde tomar un refresco o una sustanciosa comida. El servicio de vigilancia costera recae en una patrulla itinerante de la Cruz Roja que recorre constantemente el litoral nijareño.
En este punto podemos observar un paisaje típico de valle entre cerros de origen volcánico, donde sobresalen los cerros de Los Frailes y el de Majada Redonda, a ambos lados del sendero, el cual, discurre desde la playa del Arco hacia el Pozo de los Frailes por toda la zona de vaguada.
Se pueden ver los típicos aterrazamientos para cultivos, delimitados por ágaves y chumberas, que se utilizaban para aprovechar al máximo todo el espacio disponible y así retener la mayor cantidad de la escasa agua de lluvia.