Esta comarca abarca tanto pueblos albaceteños como conquenses; y es que tanto física como históricamente ambas comunidades han estado muy relacionadas entre sí. Debido a ello, a menudo se habla de La Manchuela albaceteña y La Manchuela conquense, en función de la zona a la que se quiere hacer referencia.
La Manchuela destaca en muchos aspectos. Desde el punto de vista geomorfológico, el río Júcar ha ido erosionando la tierra y la roca, a lo largo de los años, dando lugar a peculiares formaciones sedimentarias y erosivas.
El mayor atractivo de la zona son sus paisajes y ríos, ideales para la práctica de senderismo, ciclismo y otros deportes de aventura. Entre las rutas más recomendables se encuentran las de la Hoz de Júcar, la Valle de Cabriel y Llanura Manchuela.
Respecto a la gastronomía, es indispensable probar sus vinos con Denominación de Origen.