Conocida como la tierra de volcanes, La Garrotxa es una comarca gerundense situada al norte de Cataluña, en la cuenca alta del río Fluvià, en las cabeceras de la Muga y la riera de Amer y de Llémena.
En esta comarca se pueden observar dos tipos de paisaje. El más característico es el que está en la parte sur, donde se pueden contabilizar hasta 40 cráteres y diferentes coladas de lava. Es el Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa, que está considerado como el mejor paisaje volcánico de la península ibérica.
Para recorrerlo existen varios itinerarios de diferentes niveles de dificultad. Muchos de ellos están conectados a la red de senderos Itinerànnia, por lo que se puede acceder a ellos desde La Garrotxa, Ripollès y el Alt Empordà.
Una de las particularidades del Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa es que, aunque cuenta con zonas muy boscosas, en su interior hay 11 municipios. Entre ellos Olot, que es la capital de la comarca.
El norte de La Garrotxa, en cambio, ofrece una naturaleza mucho más abrupta con abundantes riscos y desfiladeros. Gracias a su riqueza paisajística, esta área está declarada Espacio de Interés Natural.
La historia y cultura de La Garrotxa la podemos conocer en sus pueblos, que datan desde la época medieval, pasando por el legado judío, al renacimiento y hasta la contemporánea. Algunos de los más visitados, por la belleza de su arquitectura, son: Santa Pau, Besalú, Castellfollit de la Roca y Vall de Bas. En algunos de ellos podrás degustar la gastronomía volcánica.