En la ribera del río Duratón, dentro de la provincia de Segovia, encontramos Fuentidueña, un municipio rico en manantiales, buen vino y famoso por su cordero.
Toda la villa está declarada Bien de Interés Cultural, en categoría de conjunto histórico. Además, algunos de sus monumentos también son declarados BIC individualmente. Prueba de ello son las ruinas del castillo y las de el Hospital de la Magdalena.
Respecto a los monumentos religiosos destacan tres iglesias, la de Santa María, la iglesia arruinada de San Martín y la de San Miguel.