Dentro del municipio de Sant Ferriol, en su extremo sureste, en la comarca catalana de la Garrotxa y muy cerca de Serinyà hallamos el pequeño pueblo de Fares. Su riqueza paisajística, como la de todos los pueblos cercanos reside en la silueta clara y sin estridencias de las masías que pueblan sus campos, esparcidos entre el verde de los bosques de la Garrotxa, tan característicos por sus colores.
La cercanía del pueblo con el Estany de Banyoles permite el baño y la práctica de distintas actividades acuáticas en él en época estival. Los amantes del senderismo podrán pasear por los bosques de la zona, de vegetación rica y espesa, acercarse al interior de los volcanes de la zona o simplemente disfrutar de la gran variedad de setas que podremos encontrar durante el otoño.
Un pueblo tranquilo nos acogerá con su calma y convertirá nuestra escapada en el momento perfecto para desconectar de la rutina.