La isla de Eivissa (Ibiza) es una de las islas de las Islas Baleares y tiene una extensión de 572 km2. Aunque popularmente sea conocida por su vida nocturna, podemos disfrutar de las múltiples alternativas que nos ofrece la isla.
Su paisaje varia del interior al exterior, aunque su flora es básicamente mediterránea, predominando el pino carrasco, el pino piñonero y la sabina. Tiene una rica fauna marina, colonias de aves de gran importancia para el ecosistema.
La isla tiene 210 kilómetros de playas varias, desde grandes playas familiares como la platja d'en Bossa hasta las calas más mágicas como la Cala d'Hort (con vistas al islote de es Vedrà) o el Pou des Lleó.
La isla cuenta con dos parques naturales: el Parque Natural de ses Salines, que comparte con Formentera; y la reserva natural de Es Vedrà, Es Vedranell y los islotes de Poniente.
Su patrimonio arquitectónico también es rico, siendo las murallas de Dalt Vila uno de sus monumentos más importantes por su denominación de Patrimonio de la Humanidad. También encontramos los montes sagrados de Santa Eulària y Sant Miquel como vestigios del pasado.
La gastronomía ibizenca se compone de su aceite de oliva virgen y el “flaó”, un pastel redondo hecho con huevos, queso fresco de oveja y hojas de hierbabuena.
A parte de practicar todo tipo de deportes acuáticos, podemos explorar la isla en kayak, globo o bici.