Cabra es un municipio andaluz de la provincia de Córdoba situado en el Centro Geográfico de Andalucía, en pleno Parque Natural de las Sierras Subbéticas y a tan solo media hora de la playa.
Es una de las poblaciones más antiguas de la comarca, siendo los primeros vestigios de su asentamiento de época paleolítica. Ya en el Siglo III a.C. entró en la órbita romana. Igabrum constituyó un destacado núcleo urbano que asentaba las bases de su riqueza en el olivo, los cereales y la explotación de sus canteras. Cabe destacar que en época visigótica fue una de las principales sedes episcopales del sur de la Península y la pervivencia del cristianismo se prolongó incluso durante la época árabe.
El Barroco dejó su preciosismo en las calles, casas y monumentos de la ciudad, creando un conjunto armonioso y señorial.
El Museo Arqueológico alberga algunos de los hallazgos más antiguos de Cabra, procedentes de la Villa Romana de Mitra, con un importante conjunto escultórico. De su pasado andalusí, se conservan las murallas y el Castillo de los Condes de Cabra. Cabra posee uno de los conjuntos barrocos más interesantes de la provincia de Córdoba, siendo exponentes de ello La Parroquia de la Asunción y Ángeles. Otros lugares de interés para visitar son el Museo de Historia Natural -Palacio del s. XVII-, el Museo de Aceite “Molino Viejo” o el Circulo de la Amistad, así como sus numerosos parques y parajes naturales.
Cabra también es rica en tradiciones y fiestas, custodiada por sierras, manantiales y parajes naturales de gran belleza. Se recomienda disfrutar de su gastronomía, muy unida a sus orígenes en Al-Andalus. La ciudad también es conocida por su abundante y rica huerta, con cuyos productos se preparan suculentos potajes.