Ansó es una localidad oscense de la Jacetania situada en el Pirineo Aragonés, en el valle del río Veral y junto al Valle de Hecho. Su término municipal se extiende hasta la frontera con Francia atravesando el Parque Natural de los Valles Occidentales y alcanza también el Paisaje protegido de las Fozes de Fago y Biniés.
Ansó es un pueblo monumental, ejemplo vivo de la arquitectura popular pirenaica. Sus casas y sus calles nacen de la piedra recogida del río y entre sus construcciones destacan un torreón medieval del siglo XIV y la iglesia parroquial de San Pedro (siglo XVI), de gran tamaño y de un estilo gótico al que se unen partes platerescas, barrocas y renacentistas. En el terreno cultural cuenta con lugares de interés como el Museo del Traje, el Museo Etnológico, el Museo de Arte Sacro y el Centro de Interpretación de la Naturaleza, en el que descubrir que Ansó es uno de los pocos lugares en los que todavía sobrevive el oso autóctono de los Pirineos.
La oferta de actividades deportivas en el Valle de Ansó es muy amplia. Los protagonistas son el senderismo y el esquí de travesía ya que el lugar es idóneo para su práctica. Destacan a su vez el piragüismo y la escalada y en invierno puede practicarse esquí de fondo en Linza. El municipio ofrece también una gran oportunidad para la recogida de setas y para quienes quieran practicar la caza y la pesca.