La casa de Lola

Todo excelente

Angeles Delgado

Casa muy acogedora y preciosa, espacio para varias personas zona exterior genial también. Bien situada. La chimenea estupenda

Fin de Año de lujo!!!

Esther Milla Luna

Magnífica casa, cuidada al detalle . Pasmos un fin de año espectacular, tanto por la acogida de la gente de Cala como por la calidez que nos ofrecieron los propietarios de la casa. Recomendable 100%

Un bello punto donde disfrutar y desde donde conocer la Sierra de Huelva

Emilio Martinez-cañavate

La Casa Rural de Lola, ubicada en el precioso pueblo de Cala, es puerta de entrada la vertiente norte de Sierra Morena Occidental. Acogedora y tranquila. Su amplio salón y magnifica chimenea nos ha permitido disfrutar de largas veladas tras nuestras jornadas de senderismos (GR 48) y micológica. De limpieza exquisita y decoración tradicional; perfecta y totalmente equipada (cocina, dormitorios,..) cuenta con un precioso y amplísimo patio posterior con una magnifica piscina que no nos atrevimos a disfrutar por la época en que nos hospedamos. Mención también al trato atento y hospitalario que tanto Ana y Teresa en todo momento nos brindaron orientándonos y aconsejándonos en todo aquello que les requerimos. Cuando hablamos de la Sierra de Huelva todos pensamos en Aracena, Galaroza, Jabugo, Almonaster...bellos pueblos pero olvidamos esos maravillosos pequeñitos pero grandes desconocidos: Cala, Arroyomolinos, Cañaveral, Fuentes Hinojales, Cumbres de Enmedio, Mayores o de San Bartolomé,...todos con sus fortalezas, con sus dehesas, sus alcornocales, su gastronomía y, como no, sus gentes. La estancia en La Casa Rural de Lola nos ha permitido descubrir y disfrutar de todo ello en otoño. Volveremos con la primavera! Gracias Ana, gracias Tere

Una autentica casa rural con encanto y alma.

Jorga Mejías Garrón

Hemos pasado unos magníficos días en familia, en esta autentica casa rural con encanto y alma. Decorada con mucho gusto y perfectamente equipada con todo lo necesario para centrarte en relajarte, desconectar y disfrutar de unas tranquilas vacaciones. Hemos disfrutado mucho de la piscina, del fantástico jardín en el que tumbarse a ver las estrellas, de la mesa de pingpong (no podíamos dejar de jugar) de poder cocinar con productos locales (unos tomates impresionantes).Del entorno rural en el que se encuentra. Cala, un pueblo de sierra con su iglesia y castillo y gente amable. Muchas gracia a Ana y su familia por tu acogida y atención. En definitiva, una magnífica experiencia rural, altamente recomendable.