2 pueblos para conocer la ruta de la seda en España
Escrito por
19.08.2023
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La ruta de la seda es ampliamente conocida en China. Sin embargo, España también participó en estas rutas comerciales y el punto de partida se encuentra en la antigua Xátiva, conocida en la actualidad como Játiva, en la Comunidad Valenciana. En este asentamiento, existía un centro de producción de paños de seda y oro en la taifa de Balansiya. Incluso, cuando estaba bajo dominio cristiano, fue la primera referencia en la creación de sedas en 1316. Si quieres un itinerario perfecto para conocer esta ruta llena de historia, no te pierdas lo que tenemos que contarte.
La ruta en España apunta directamente a la Comunidad Valenciana. El puerto de Valencia tuvo un gran peso dentro de este comercio y se encargaba de transportar sedas granadinas que viajaban desde Málaga y Almería hasta Génova. En la actualidad, el mayor registro de sedas a nivel histórico en España se encuentra en Granada y Valencia. A continuación, te enseñamos dos pueblos que serán puntos obligatorios en tu itinerario de la seda.
Cájar, el pueblo granadino que nació por la ruta de la seda
Cájar es un municipio español que se encuentra en la comarca de la Vega Granadina. Destaca por ser un asentamiento de casas blancas para repeler el calor del verano y una gastronomía de rechupete. Algunos de sus platos más destacados son la sopa de maimones, la cazuela de bacalao, la sopa de pimentón y las salchichas de Cájar.
En especial, tienen un plato llamado las manos de ternerillo y de cerdo en ajo pollo, que nace de su historia musulmana y que se elabora con almendra frita, pimiento rojo seco, pan frito, patatas y un manojo de ajo, perejil y azafrán. A todo esto, se le debe añadir un poco de vino blanco y agua.
Después de probar este manjar, debes acudir al museo de la seda de Cájar, que se encuentra en una cueva espectacular que había utilizado el francés-suizo Enrique Tabourot Aupede para lanzar un negocio relacionado con el cultivo del champiñón. El objetivo de este proyecto museístico es enriquecer y dinamizar el municipio mediante el conocimiento de la seda, un material que está vinculado al origen histórico de Cájar y que resulta verdaderamente interesante.
Para completar la experiencia de la ruta de la seda en Granada, te aconsejamos que acudas a dormir al Cortijo Las Encinas, en Monachil. Está a tan solo ocho minutos en coche de Cájar y es un lugar espectacular que se adentra en las montañas granadinas repletas de encinas centenarias. Se ubica dentro del Parque Natural de Sierra Nevada y es un paraje que emana magia, gracias a su típica vegetación y a vistas increíbles.
Játiva, la aldea musulmana famosa por la seda
Játiva es un pueblo que rebosa historia en cada uno de sus rincones. Sus calles empedradas y sus fortificaciones, que se construyen en lo alto de una montaña, consiguen que Játiva tenga un aire emblemático. Bajo dominio cristiano, durante el año 1316, se conocía que en este asentamiento se producían paños de seda y oro, siendo una aldea corporativa que eclosionó la industria sedera. Es un paraje ideal para sumergirte en una historia rica y diversa.
Desde este pueblo, a 48 minutos en coche, se encuentra Valencia, donde podrás disfrutar de la parte más pedagógica de la ruta de la seda. Debes comenzar por el barrio de Velluters que significa terciopeleros. En este emplazamiento, se desarrolló durante los siglos XV, XVI, XVII y XVIII la fantástica industria de la seda. Podrás visitar el Museo de la Seda para contemplar colecciones de telas y telares del siglo XVIII que siguen funcionando. Otro factor de peso para visitar este lugar es que cuenta con el archivo del gremio de la seda más grande de Europa.
Una vez acabada la visita, el siguiente punto de interés es la Lonja de la Seda. Se encuentra en pleno centro de Valencia y es una construcción civil de estilo gótico Patrimonio Mundial por la UNESCO que te dejará sin palabras. Es una visita muy recomendada porque fue un punto clave para el comercio de seda y se puede visitar el Salón Columnario, el sitio donde hacían las negociaciones.
Por último, para completar la ruta de la seda, es muy aconsejable visitar el Museo Nacional de Cerámica, que cuenta con numerosas piezas realizadas con seda y es un edificio precioso de estilo barroco.
Para descansar en un paraje que desprende historia y está en plan naturaleza, te recomendamos encarecidamente la Casa Rotja, a una hora en coche de Valencia. Es una masía del siglo XVIII que se encuentra rodeada de extensos campos de olivos y viñedos. Cuenta con un jardín increíble y las estructuras se erigen alrededor de un patio central con un pozo. Dispone de una primitiva bodega y una antigua almazara, por lo que podrás disfrutar del molino de aceite y la prensa originales. Para los días de calor, dispone de barbacoa y piscina.
Redacción ER