Vengas de donde vengas, los muros y torreones de Daroca te anticipan que no estás en un pueblo cualquiera, sino en un lugar en el que el pasado y el presente le confieren un sello personal.
Situada en plena Cordillera Ibérica, en las inmediaciones del fértil Valle del Jiloca, Daroca es una de las ciudades históricas de Aragón. Su estratégica posición en el cruce de caminos entre Aragón, Levante y Castilla la convirtió en un enclave muy valorado por los reyes aragoneses y en el que florecieron las tres religiones del Libro (judaísmo, cristianismo e islam).
Daroca, el hechizo de la historia
Fortificada por uno de los perímetros amurallados más largos y diversos del país, sus torreones y castillos protegían un entramado urbano de indiscutible sabor antiguo que se extiende a ambos lados de un barranco, mientras que sus famosas puertas, la Alta y la Baja, dan la bienvenida al viajero a la calle Mayor, zona clave de la recreación del Mercado Medieval, a finales de julio. El túnel de La Mina, la Fuente de los Veinte Caños, las iglesias de San Miguel, la de San Juan y la de Santo Domingo o sus casas palaciegas complementan este Conjunto Histórico-Artístico.
Entre sus edificios históricos destaca la Basílica de Santa María de los Sagrados Corporales, llamada así en honor de un milagro eucarístico relacionado con la creación de la festividad del Corpus Christi y que en Daroca es Fiesta de Interés Turístico. También la particular celebración de su patrón el 7 de marzo, dedicado como se hacía antiguamente a Santo Tomás de Aquino, propulsor de la fiesta del Corpus Christi y del reconocimiento de Los Corporales de Daroca como “milagro eucarístico”.
Este episodio ocurrido en el siglo XIII, en plena conquista del Reino de Valencia, forma parte indisoluble de la historia de Daroca y el motivo principal de que las fiestas mayores de la localidad sean las del Corpus Christi. Tanto éstas como la Feria Medieval de Daroca han sido reconocidas como Fiestas de Interés Turístico de Aragón.
El famoso órgano del siglo XV y la rica tradición musical de la ciudad justifican la celebración, desde 1979, del Curso y Festival Internacional de Música Antigua, en agosto.
Memoria y tradición
Además de las fechas indicadas de sus celebraciones populares, un inmejorable momento para visitar Daroca también es el invierno: puedes disfrutar de las fiestas de nuestra tradición, San Vicente mártir, San Valero, (21 y 28 de enero respectivamente) San Blas o Santa Águeda (el fin de semana más próximo al 3 y 5 de febrero) en las que el fuego renovador y los productos gastronómicos calientan el ánimo de vecinos y visitantes.
48 horas en Daroca
Viernes por la tarde
El primer lugar que tenemos que visitar es la oficina de turismo local, situada en la Calle Mayor, nº 44, arteria principal de Daroca, donde facilitarán toda la información que necesitemos: planos, folletos, servicios turísticos como visitas guiadas y horarios, además de rutas y actividades disponibles.
Para familiarizarnos con la ciudad, daremos un paseo antes de cenar en el lugar que más se adapte a nuestro gusto. Daroca alberga un patrimonio artístico que la convierte en un muestrario de la evolución del arte medieval, desde el románico tardío que se puede ver en la iglesia de San Miguel, con su extraordinario mural del siglo XIV, al incipiente mudéjar del ábside de la iglesia de San Juan o la torre de Santo Domingo.
La Basílica de Santa María es, en sí misma, un conjunto excepcional en el que destaca su variado patrimonio gótico, tanto el escultórico de la Puerta del Perdón, la capilla de los Corporales o la Virgen Goda, como el pictórico de los diversos retablos del siglo XV, o el patrimonio orfebre de las cruces procesionales y la custodia relicario de Pere Moragues, sin olvidarnos de su reconocido órgano.
Fuera de sus templos, callejear por Daroca supone un descubrimiento para el alma enamorada del detalle, no solo a la vista de sus casas palaciegas, como la Casa de los Luna, de 1400, sino por su propio trazado urbano en el que destaca su personalísima calle Mayor, flanqueada por las monumentales Puerta Alta y la Puerta Baja y los barrios anexos de las antiguas Judería y Morería.
La arquitectura civil tiene su mayor exponente en el túnel de La Mina, obra de ingeniería hidráulica del siglo XVI destinada a evitar las graves inundaciones que afectaban a la ciudad.
Sábado por la mañana
Vayamos solos o en grupo, por libre o en visita guiada, no nos podemos perder la Ruta Monumental de Daroca. Si decidimos ir acompañados por un guía, partiremos desde la Oficina de Turismo a las 11:00 de la mañana y tras las presentaciones y una breve charla, entraremos en la Basílica de los Sagrados Corporales. Os sorprenderá la variedad de estilos y el “misterio” que guarda.
Una vez en el exterior, nos dirigiremos a los barrios más antiguos de Daroca para impregnarnos totalmente de su historia mientras realizamos un completo viaje por sus arquitecturas medievales. Dos horas aproximadas de explicación nos llevarán a la zona monumental de la Puerta Baja, digno colofón de nuestra visita.
Será un buen momento para sentarnos en una terraza y disfrutar de un aperitivo antes de comer.
Sábado por la tarde
16:30 h: Para estirar las piernas tras la comida, podemos acercarnos a la Puerta Alta y a La Mina, monumento renacentista del que habremos oído hablar durante la visita.
17:30 h (I): Os presentamos dos opciones. Por un lado, una visita guiada al Museo de la Pastelería de Manuel Segura, abierta en 1874. Desde entonces, esta familia abandera la tradición pastelera de Daroca y dispone de una excelente colección de herramientas y utensilios relacionados con este oficio. Visitar su museo es un viaje al pasado de esta familia y de su buen hacer en lo referente a la elaboración de nuestros “lamines”. Chocolates, turrones, caramelos, pasteles de varios tipos… allí os enseñarán cómo se trabajaban de manera artesanal. Degustar sus productos es un verdadero placer.
17:30 h (II): Otra opción para familias con niños es el Museo de la Naturaleza de Daroca, con su completa colección de huevos y plumas de aves, reclamos y señuelos sonoros y otros elementos característicos de la fauna de nuestra comarca. La visita se complementa con los tesoros escondidos en el Baúl de la Naturaleza, una experiencia pensada, principalmente, para despertar la curiosidad de los más pequeños.
19:00 h: Tras nuestro paso por uno de estos museos, podremos recorrer los barrios de la antigua Morería y la Judería o acercarnos a los Miradores de la Puerta del Arrabal, de la Ermita de Nazaret o del Paseo de la Fraternidad y del Ingenio. Con suerte los colores del atardecer no defraudarán.
Domingo por la mañana
9:00 h: Una vez desayunados, nos preparamos para caminar. Nos espera la Ruta del Castillo y las Murallas de Daroca un recorrido por sendero de tierra con un importante desnivel, pensado para hacer en unas dos horas. Para los amantes del senderismo hay señalizadas dos rutas más largas: 1) Rambla del Punzón y de la Nevera, con una distancia de 5,1 km y de baja dificultad. Se trata de una senda firme con tramos en pendiente pensada para hacer en 1 hora y 30 minutos aproximadamente. Y 2) El Camino Azul, de unos 10 km, de características similares a la anterior pero con un tiempo de 2 horas y 30 minutos. También acaban de presentarse dos nuevas rutas por la comarca para bicicleta y trail.
La Ruta del Castillo y las Murallas de Daroca empieza en el exterior de la Puerta Alta y nos lleva por la Judería hasta la rampa de ascenso al Castillo Mayor, donde disfrutaremos de inmejorables vistas. Una serie de paneles interpretativos nos ayudarán a hacer una lectura del paisaje y a conocer la famosa leyenda de Melihah, la Morica Encantada, una de las muchas leyendas de Daroca.
Siguiendo la señalización, afrontaremos con ánimo el ascenso hasta el Castillo de San Cristóbal, sabiendo que, a mitad de camino, podremos relajarnos sin olvidarnos de tomar alguna fotografía. Conquistada la cúspide del monte y su castillo, comenzaremos el descenso por un tramo de muralla restaurada, pasando por el torreón de los tres Guitarros hacia la Puerta del Arrabal y terminando en la Puerta Baja.
12:00 h: Nos queda tiempo para hacer nuestras últimas compras de recuerdos y de productos típicos de la comarca: Pastas Romero, panes y pastas de la Panadería, de la Pastelería o de las Madres Dominicas, miel natural, vinos de la zona… O aventurarse a probar una tentadora “hidromiel”.
Más experiencias en Daroca
Daroca ofrece experiencias que dejan buenos recuerdos. Y no solo a los caminantes. También a los amantes de BTT o del motor, no en vano Daroca se encuentra en las rutas “slowdriving” de Aragón.
Eventos anuales como el “Daroca Trail“ o el conocido como “Tramo Tierra de Daroca”, o la calamochina Jamón Bike, convocan a un nutrido grupo de deportistas, acompañantes y espectadores en diversas épocas del año. En todos ellos, no sólo Daroca es referente en los itinerarios, sino también los diversos parajes que la rodean.
Menos conocido pero igualmente interesante es el Torneo de Cetrería “Antigua Corona de Aragón”, que pone en relieve la relación histórica de la naturaleza con sus usos cinegéticos.
Dónde dormir en Daroca
Redacción ER