La Región de Murcia, tal como anuncian en la portada de su web de turismo, es de estos lugares a los que, una vez lo visites, querrás volver una y otra vez. Te invitamos a descubrir esta tierra de contrastes que va desde las impresionantes playas de la Costa Cálida hasta la imponente Sierra Espuña.
Otoño es una de las mejores épocas para descubrir esta región que cuentan con 300 días de sol al año. Prepara la mochila, carga el móvil y ven a disfrutar del encanto de algunos de los pueblos más bonitos de Murcia.
Alhama de Murcia
Situada en pleno Valle de Guadalentín, Alhama de Murcia ha estado habitada desde la prehistoria. Su nombre proviene del árabe Al-hamma, que significa «baños termales», haciendo referencia a las aguas termales de la zona, que fueron aprovechadas por los árabes y romanos.
Uno de los símbolos más importantes de este destino es su castillo, de origen musulmán, situado en una colina sobre el pueblo. Desde la muralla podrás disfrutar de impresionantes vistas del valle. Si te gustan las rutas, puedes realizar el paseo por la Senda del Castillo.
Otro imprescindible que visitar es la Iglesia de San Lázaro. Reedificado en el siglo XVIII, el templo se halla sobre los restos de una antigua iglesia medieval y destaca por su estilo barroco.
Blanca
El encantador pueblo de Blanca se encuentra en pleno Valle de Ricote, una de las zonas más pintorescas y con más historia de la región. En 2022, el pueblo fue uno de los 10 municipios finalistas de la VI edición de la Capital del Turismo Rural. Este destino que combina su rica herencia cultural con un entorno natural impresionante, especialmente gracias a su ubicación a orillas del río Segura y en un entorno montañoso.
Durante tu estancia podrás visitar el Castillo Medieval de Blanca, que se encuentra en lo alto de un cerro que domina el valle. La fortaleza tuvo una gran importancia estratégica en la época musulmana y durante la época cristiana, se convirtió en el símbolo del poder de la Orden de Santiago.
Bullas
Bullas es un encantador pueblo situado en la comarca del Noroeste. Este destino es conocido por su rica tradición vinícola, reconocida con la Denominación de Origen Bullas. Aquí se encuentra el Museo del Vino, un espacio dedicado a preservar y difundir la historia del cultivo de la vid y la producción de vino en la región
La Iglesia de Nuestra Señora del Rosario, construida en el siglo XVIII, es uno de los principales monumentos de Bullas y está declarada como Bien de Interés Cultural desde 1982. Otro imprescindible en los alrededores del pueblo es el Salto del Usero, se trata de una pequeña cascada que conforma una poza con cúpula, ¡es una pasada!
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Calasparra
También en la comarca del Noroeste está Calasparra. Este pintoresco pueblo es conocido principalmente por su famoso arroz con Denominación de Origen Protegida (DOP), su rico patrimonio cultural y religioso, así como por su espectacular entorno natural, marcado por ríos, montañas y cuevas.
Además de callejear por el pueblo, te recomendamos una visita por el impresionante Santuario Virgen de la Esperanza, uno de los lugares más emblemáticos de Calasparra. El santuario está excavado en una gruta, perfectamente mimetizado con el entorno.
También en las afueras del pueblo encontrarás la Cueva del Puerto. Es la cueva de mayor recorrido horizontal de toda la Región de Murcia. Está habilitada para visitas turísticas, son 700 metros de recorrido viendo sus espectaculares formaciones de estalactitas y estalagmitas.
Caravaca de la Cruz
Caravaca de la Cruz es una histórica y pintoresca localidad, famosa por ser uno de los cinco lugares santos del cristianismo con derecho a celebrar un Año Jubilar In Perpetuum, lo que la convierte en un importante centro de peregrinación religiosa. El símbolo más importante del pueblo es la Vera Cruz de Carava, en la que se encuentra unas astillas de la cruz en la que murió Jesucristo.
El pueblo cuenta con un casco antiguo lleno de encanto, donde destacan edificios religiosos, palacetes nobiliarios y callejuelas empedradas. La localidad está coronada por un castillo de origen musulmán que fue reconvertido en fortaleza cristiana tras la Reconquista. En su interior se encuentra el Santuario de la Vera Cruz.
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Cehegín
Cehegín es un encantador municipio situado en la comarca del Noroeste, rodeado de montañas y campos de cultivo que crean un entorno rural lleno de belleza y tradición. Con una rica historia que se remonta a tiempos prehistóricos, un casco antiguo de gran valor arquitectónico y cultural, y un entorno natural privilegiado, Cehegín es un lugar perfecto para quienes buscan explorar la historia, la naturaleza y la cultura de la región.
El casco histórico de Cehegín es uno de los más bellos y mejor conservados de la Región de Murcia. Declarado Conjunto Histórico-Artístico, está lleno de estrechas callejuelas empedradas, casas señoriales, palacios y edificios religiosos que muestran la evolución de la villa a lo largo de los siglos.
Jumilla
Jumilla es una localidad conocida por su rica tradición vinícola y su patrimonio histórico. Su principal atractivo es la Denominación de Origen Protegida Jumilla. Y la Ruta del Vino de Jumilla permite a los visitantes explorar bodegas locales, viñedos y participar en catas.
Además, el Castillo de Jumilla, una fortaleza medieval que ofrece vistas impresionantes de la ciudad y del paisaje. La ciudad también destaca por su patrimonio arquitectónico. El casco histórico alberga la Iglesia de Santiago, construida en el siglo XV, y el Teatro Vico, un bello edificio del siglo XIX.
Moratalla
Moratalla es conocida por su impresionante entorno natural y su rico patrimonio histórico. Rodeada de montañas y sierras como la Sierra del Cerezo y la Sierra de la Muela, ofrece paisajes ideales para el senderismo y la observación de la naturaleza.
El casco histórico de Moratalla es otro de sus grandes atractivos, con su característico trazado medieval y calles empedradas. Dominado por el Castillo de Moratalla, una fortaleza del siglo IX con una imponente torre del homenaje, callejear por el pueblo es como viajar al pasado.
Justo en la frontera con Andalucía y Castilla-La Mancha, se encuentra la Región de Murcia más distante a los tópicos playeros. Las sierras protagonizan paisajes de singular belleza, verdes y agrestes, salpicados por caseríos y huertas. Ahí está Moratalla, escalando el monte con sus casas apiñadas al antiguo castillo.
