Los pueblos más floridos de España para dar la bienvenida a la primavera

Escrito por

21.03.2024

|

4min. de lectura

Primavera en Aitona
Primavera en Aitona. Por: Nestor

La primavera es una de las estaciones más vistosas. Las flores comienzan a estirar sus pétalos para mostrar todos sus colores, llenando los campos de vida y aromas. Todo este baile de la naturaleza invita a los más aventureros a salir del estrés de la rutina para abrazar la relajación del campo. A continuación, te mostramos los pueblos más floridos de España para tener una escapada primaveral de cuento.

Brihuega, uno de los tesoros de Guadalajara en primavera

Primavera en Brihuega
Primavera en Brihuega. Por: Diego

Brihuega te envuelve en un abrazo de naturaleza alcarreña, donde la danza entre páramos y valles del río Tajuña crea un escenario de contrastes fascinantes. En este paisaje, los bosques de encinas y campos de secano conviven con huertos, olivares y campos aromáticos de lavanda y romero, dando vida a colmenas que producen miel.

Los bosques esconden secretos de gatos monteses y tejones, mientras que las aves rapaces como los azores y las águilas migratorias dominan el cielo. En los páramos y valles, rebaños de ovejas pintan el paisaje y el río Tajuña alberga especies autóctonas y añadidas, creando un cuadro natural único. Si quieres comenzar la primavera con una experiencia espectacular, tienes que visitar este pueblo repleto de encanto.

Para pasar la noche, te recomendamos acudir a Gualda, a tan solo 30 minutos en coche. En esta aldea, encontrarás un descanso pleno en El Balcón de Gualda, una casa rural de finales del siglo XVIII con todas las comodidades. La casa mantiene la singularidad de su fachada con piedra y rejería, conservando su encanto original. Su interior de paredes de piedra y vigas de madera combina lo rústico con lo moderno, brindando una experiencia agradable. Además, cuenta con capacidad para 8 personas, ofreciendo 3 camas matrimoniales y un sofá cama doble, cada habitación con baño privado y televisión. De forma gratuita, proporcionan cuna y bañera para bebé.

Oña y la floración de los cerezos en el valle de las Caderechas

Primavera en Valle de las Caderechas
Por: Noradoa

Las Caderechas, un tesoro escondido en La Bureba, cautiva con su paisaje mágico, salpicado de bosques verdes y árboles frutales que decoran pintorescos pueblos de arquitectura encantadora. Explorar sus carreteras tranquilas es sumergirse en un viaje lleno de sensaciones.

Aunque cualquier momento es ideal para visitar este paraíso, es importante recordar que durante la primavera florecen los cerezos del valle de las Caderechas, dejando una escena digna de postal. Desde Salas de Bureba, una joya con casonas señoriales, se inicia el camino hacia el corazón de Las Caderechas, donde se entrelazan bosques maduros y campos frutales, hogar de una rica fauna y famosas cerezas y manzanas reineta.

Para completar este viaje de ensueño, te recomendamos hospedarte en el pueblo de Oña, a tan solo 10 minutos en coche de Salas de Bureba. En esta aldea, encontrarás la Casa Rural El Lobo. Este alojamiento rural ofrece 9 habitaciones con baño y televisión, 2 salones, una cocina y un merendero con cocina de leña. Rodeada por el parque natural «Los Montes Obarenes», el entorno presenta una diversidad forestal con pinos, quejigos, encinas, enebros y arbustos, además de hayas, arces y serbales. Sin duda, es una forma de continuar con tu aventura en un refugio en plena naturaleza para disfrutar de la serenidad y belleza del entorno.

Aitona, un oasis de melocotoneros floridos en Lleida

Melocotoneros de Aitona en primavera
Melocotoneros de Aitona. Por caftor

Aitona, el secreto mejor guardado del Segrià, deslumbra con más de ocho mil hectáreas de melocotoneros, nectarinas y paraguayos que pintan sus campos en un espectáculo rosáceo antes de la primavera.

Este rincón transformó su historia, de secano y cultivos tradicionales como el trigo, el olivar y los almendros, a la colorida paleta de melocotones gracias a las aguas de una antigua acequia árabe. Desde finales de febrero hasta mediados de marzo, las flores despiertan en una danza impredecible. Si eres un amante de la bicicleta, te recomendamos que la incluyas en este viaje porque es una auténtica pasada pasear con ella entre los melocotoneros florecidos.

Para poder alojarte cerca de este fenómeno natural espectacular, te aconsejamos descansar en Torrebesses, a 25 minutos en coche de Aitona. La casa rural Castell Palau Torrebesses, con más de 1000 años de historia, ofrece paz y tranquilidad a 15 minutos de Lleida. Rodeado de un rico patrimonio cultural, cuenta con una guía turística los fines de semana y está situado junto al centro de interpretación de la piedra seca.

Además, abarca 700 m² en un terreno de 1800 m². Cuenta con 4 habitaciones, 3 baños, garaje privado, jardín, terraza, calefacción, cocina equipada, piscina y zona de juegos. Es un refugio histórico con comodidades modernas, ideal para explorar la historia y disfrutar de la belleza de los melocotoneros en flor.

Redacción ER

Etiquetas

Si te ha gustado, compártelo

¿Estás pensando en tu próxima escapada?

Publicidad

Comentarios

  1. Maria Ascensión Asensio Mata 22 de marzo de 2024 a las 10:37 - Responder

    Buenos días, me gustaría saber si es posible que me recomienden algún alojamiento rural en Cuenca para los días del 31 al 3 de abril, muchas gracias

Si te gusta escaparte, te gustará nuestra newsletter

Te enviamos recomendaciones personalizadas para que tu próxima escapada sea inolvidable. ¿Te unes?