Descubre los 4 pueblos con los Carnavales más curiosos

Si hay una fecha que nos gusta mucho, es sin duda, el Carnaval. España es el país europeo que más carnavales conserva, sobre todo por el noroeste peninsular. Y en esta ocasión, te queremos invitar a conocer los 4 pueblos con los carnavales más curiosos de todo el país. ¿Te animas? 

Lantz (Navarra)

Arrancamos nuestra ruta carnavalera en Navarra, concretamente en el municipio de Lantz, situado en el Valle de Anue, al norte de Pamplona. Los carnavales de esta villa de  apenas 140 habitantes, son uno de los máximos exponentes del carnaval rural y están declarados bien de interés cultural por el Gobierno de Navarra. 

Cuenta la leyenda que siendo Lantz un lugar de paso hacia Francia, solía haber bastantes bandidos que abusaban y robaban a los vecinos de la villa; de entre todos ellos, Miel Otxin era el peor y más temido. Su nombre se debe a que en la antigüedad robó mil otxines (moneda usada antaño en Navarra).

Este muñeco gigante, de tres metros de altura, suele ser capturado  el lunes de carnaval y paseado por el pueblo a ritmo de txistu y tamboril mientras que el martes de carnaval, tras un nuevo paseo matutino y vespertino, es ejecutado y quemado en la hoguera. Todo un espectáculo que este año tendrá lugar del 11 al 13 de febrero.

Santoña (Cantabria)

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Dejamos Navarra para llegar a tierras cántabras y es que el municipio de Santoña también cuenta con unos carnavales muy especiales. También conocidos como “Carnaval del Norte”, se celebran desde 1982 y cuenta con un marcado acento marinero, debido a que Santoña es un municipio de profunda vocación marinera. Murgas, trajes, carrozas y, sobre todo, un pueblo volcado para que todos los que visiten durante esos días el municipio, disfruten al máximo de su carnaval.

Quédate con este nombre: ​​El Juicio en el Fondo del Mar del Carnaval de Santoña. Y es que esta representación, tiene carácter de Fiesta de Interés Turístico Nacional y en ella, un besugo enamorado, (raptó a una sirena), es juzgado por Neptuno en el fondo del mar. La puesta en escena se compone de un fondo de escenario simulando el fondo del mar y unos actores disfrazados de los diferentes tipos de peces que se encuentran en la bahía, además de Neptuno y de la sirena.

Tras la representación, el Besugo, símbolo del Carnaval de Santoña, es llevado al paseo marítimo, donde se arroja a las aguas de la bahía y se quema. A modo de “entierro de la sardina”, el besugo desprende fuegos artificiales al ser quemado, poniendo así fin al carnaval. ¡Una auténtica maravilla!

Bielsa (Huesca)

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¿Qué tal si hacemos una parada en el municipio aragonés de Bielsa? Y es que si hay una fiesta que Bielsa espera con entusiasmo durante todo el año, es sin duda, su carnaval, uno de los más antiguos de España y el más famoso de todo Aragón. 

Situado a las puertas del valle de Pineta, este típico pueblo pirenaico ha sabido conservar sus tradiciones más singulares y cuenta con unos Carnavales a los cuales acuden una enorme cantidad de visitantes atraídos por sus singulares personajes: las trangas, las madamas… Los hombres solteros se visten de trangas, de madamas las mujeres, y las calles se llenan de diversión. 

El carnaval comienza el jueves por la noche cuando Cornelio Zorrilla (muñeco hecho con ropas viejas y relleno de paja) toma vida. Se cuelga en la ventana del ayuntamiento, y es dejado allí durante todo el carnaval. La fiesta termina el domingo cuando este es juzgado por sus fechorías y se le condena a morir apaleado y quemado en la hoguera. ¡Visita obligada si tienes pensado pasarte por Huesca!

Almiruete (Guadalajara)

Toca hacer una parada en Almiruete, uno de los pueblos más bonitos del Parque Natural de la Sierra Norte de Guadalajara. No es un pueblo especialmente grande, pero disfrutarás mucho de la visita si te gustan los lugares auténticos. Cuenta con empinadas calles donde encontrarás una preciosa iglesia románica, muchas casas de pizarra negra y unas cuantas fuentes de piedra.

Los Carnavales de Almiruete son todo un evento para las poco más de 35 personas que viven en el pueblo y los turistas que vienen a vivir y celebrar en primera persona una de las fiestas paganas más singulares de la provincia. Lo más característico de esta celebración ancestral radica en sus participantes: Los Botargas y Las Mascaritas.

Cada año, el sábado correspondiente, el grupo de botargas, compuesto por los mozos, se reúne en un emplazamiento secreto para comenzar a vestirse para la ocasión. El traje de botarga es realmente complejo y no deja a la vista ni un ápice de la piel del portador. Las caretas, que representan animales, demonios u otros horrores imaginables, dan el toque de color a cada uno de los participantes. Las mascaritas por su parte, todas mozas del pueblo, esperan en él la llegada de los botargas, que se produce pasadas las cuatro de la tarde, después de que el sonido de un cuerno de toro haga vibrar el valle. ¡no te lo puedes perder!

¡La vida es un carnaval y estamos deseando saber el destino que escogerás para vivir en primera persona esta gran celebración!