La primera tirolina transfronteriza que permite viajar en el tiempo

Perfil Carmen López, periodista

Escrito por

07.01.2025

|

6min. de lectura

Tirolina transfronteriza
Tirolina transfronteriza. Por dudlajzov

A veces, las fronteras geopolíticas que diferencian dos países están nada más que dibujadas por una línea en los mapas. O con un cartel de bienvenida y despedida, en el plano físico. En algunas ocasiones, estos límites cuentan con fronteras naturales, como es el caso de Sanlúcar de Guadiana (Huelva) y Alcoutim (Portugal), que están separados por el río Guadiana. Aunque esta frontera tiene dos peculiares más: podemos cruzar de un país a otro volando en tirolina y, cuando lleguemos, habremos viajado en el tiempo. 

La empresa Limite Zero ofrece la posibilidad de sortear el cauce del río Guadiana de Sanlúcar a Alcoutim mediante la que dicen que es: ‘la primera tirolina transfronteriza del mundo’ (no se tienen noticias de otras con las mismas características). Tiene una longitud de 720 metros y el pasajero se desliza por ella a una velocidad comprendida entre los 70 y los 80 kilómetros por hora durante cinco minutos. Un dato: se gana una hora con el viaje, ya que en Portugal hay una hora menos que en España por el cambio de huso horario.

Tirolina entre Sanlúcar de Guadiana y Alcoutim. Por AngelLuis.
Tirolina transfronteriza entre Sanlúcar de Guadiana y Alcoutim. Por AngelLuis.

El transporte hasta la plataforma de salida se hace en grupos de hasta ocho personas. Una vez en Alcoutim, se regresa a Sanlúcar de Guadiana en un ferry que sale del puerto (el precio no está incluido en el de la experiencia de tirolina, un dato a tener en cuenta), situado a unos cinco minutos a pie desde el lugar de ‘aterrizaje’. No hace falta que la vuelta sea inmediata, así que se puede aprovechar el viaje para conocer el municipio luso, muy recomendado.

Para saber horarios y precios, lo más fiable es acudir a la página web de la empresa. Además, hay otros detalles importantes a tener en cuenta, como los límites de peso (tanto por lo bajo como por lo alto), así como de edad.

Sanlúcar de Guadiana y Alcoutim, una relación con altibajos

Decía Saramago que: “Las  dos  villas,  puestas  sobre  el  espejo  del  agua,  se  verán  como  espejo  una  de  otra”. Lo cierto es que con sus casas blancas y su estructura empinada que termina en los puertos, la similitud es notable e innegable. Ahora son lugares cordiales entre ellos, pero en la historia han tenido capítulos que no fueron tan agradables.

Castillo de San Marcos en Sanlúcar de Guadiana. Por AngelLuis.
Castillo de San Marcos en Sanlúcar de Guadiana. Por AngelLuis.

Según un estudio de Javier Hernández-Ramírez y C. Valério Brito (Universidad de Sevilla): las coronas de Castilla y Portugal fijaron la frontera definitiva, después de pelear por el territorio durante años, en 1297 con el Tratado de Alcañices. Pero, en lugar de instaurar la paz, como sería lógico pensar, los académicos explican que: “esta zona estuvo marcada por tensiones e incluso por conflictos bélicos puntuales”.

Uno de los periodos más agitados se produjo desde mediados del siglo XVII hasta el siglo XVIII, con la guerra de Restauración y la independencia de Portugal como dos puntos álgidos del asunto que: “Se tradujeron en un reforzamiento de este tramo de frontera, que todavía es visible atendiendo a la red de fortificaciones militares y baluartes ubicados en uno y otro lado de la raya”, sostienen los estudiosos en su trabajo.

La guerra de Secesión, que se inició en 1701 y revolucionó España durante casi una década, propició la vuelta de las hostilidades que: “Tomó la forma de una guerra de guerrillas permanente salpicada con frecuentes incursiones de los ejércitos enemigos en los pueblos limítrofes”, se explica en el informe.

Puerto de Sanlúcar de Guadiana. Por istvanszekany.
Sanlúcar de Guadiana, in Spain, is on the other side of the Rio Guadiana in front of Alcoutim in Portugal.

Toda esta amalgama de sucesos dejó huella, como se comentaba anteriormente, en la personalidad urbanística de ambos pueblos. Los dos tienen castillos fortificados situados en lo alto de sus inmediaciones, desde los que antiguamente se defendían y atacaban a cañonazos al enemigo. En concreto, el de Sanlúcar de Guadiana se llama castillo de San Marcos y la construcción que se puede observar hoy en día es el resultado de diferentes remodelaciones que se iniciaron en el siglo XIV. La última se llevó a cabo en 2011 y ahora sirve como mirador excepcional (está construido en un cerro a 136 metros sobre el nivel del mar) desde el que se puede ver el pueblo portugués donde aterriza la tirolina.

Además de pasear por sus calles de paredes blancas y oír conversaciones babélicas en las que se distingue el ‘portuñol’ (mezcla de portugués y español), una visita a la iglesia de Nuestra Señora de las Flores es un plan interesante. El edificio actual, del siglo XVIII, se erigió sobre otro anterior del siglo XVI. Nuestra Señora de la Rábida, patrona de Sanlúcar de Guadiana, es la protagonista del retablo mayor que data del siglo XVIII.

Playa fluvial de Sanlúcar de Guadiana. Por Tirolina entre Sanlúcar de Guadiana y Alcoutim. Por AngelLuis.
Playa fluvial de Sanlúcar de Guadiana. Por Tirolina entre Sanlúcar de Guadiana y Alcoutim. Por AngelLuis.

Por supuesto, el río que separa Alcoutim del municipio onubense es uno de los grandes atractivos de ambas localidades. Desde allí sale el ferry que comunica ambas orillas y se celebra el famoso Festival del Contrabando cada dos años. Dicha actividad comercial clandestina fue muy importante para la economía de los vecinos de ambas orillas décadas atrás y, de hecho, hay un mural de azulejos que dice: “El contrabando: una necesidad en el pasado, un orgullo en el presente, un legado para el futuro”.

Además, en la orilla de Sanlúcar de Guadiana hay una pequeña playa fluvial en la que está permitido el baño (una alegría en temporada estival) y se puede tomar el sol o tomar algo en un chiringuito. El pueblo fue capital de la gastronomía en 2022 y sus platos típicos también son un imán potente para las visitas: los langostinos, la manzanilla (el vino, no la infusión), las ‘papas de arena’, el pescaíto frito o el guiso tradicional llamado ‘veranillo’ son algunas de las estrellas de las cartas de los restaurantes locales. Buenos planes, sin duda.

Perfil Carmen López, periodista

Carmen López

Soy periodista y escribo sobre cosas que importan en sitios que interesan desde hace más de una década.

Etiquetas

Si te ha gustado, compártelo

¿Estás pensando en tu próxima escapada?

Comentarios

Si te gusta escaparte, te gustará nuestra newsletter

Te enviamos recomendaciones personalizadas para que tu próxima escapada sea inolvidable. ¿Te unes?