Nieve importada del Polo Norte para las estaciones de esquí del Pirineo
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28.12.2024
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Las estaciones de esquí españolas se enfrentan desde hace años a un grave problema: la escasez de nieve. Ante esta situación, provocada por el calentamiento global del planeta asociado al cambio climático, los responsables de las instalaciones invernales del Pirineo han decidido tomar cartas en el asunto y adoptar medidas drásticas. Han elaborado un plan estratégico para importar nieve del Polo Norte, con el objetivo de asegurar el abastecimiento del blanco elemento en sus pistas en el futuro.
El calentamiento global derrite el manto de nieve pirenaico
Lo cierto es que, desde hace décadas, se vienen notando los efectos del cambio climático en las estaciones invernales de todo el mundo, incluidas, por supuesto, las españolas. Cada vez los inviernos son más cortos y, por consiguiente, las temporadas de esquí también. Comienzan más tarde, y terminan antes. Asimismo, el manto de nieve es más escaso y menos espeso en las pistas.
Sirva como ejemplo lo sucedido esta temporada. A mediados de diciembre, más de la mitad de las estaciones de esquí del Pirineo todavía no habían podido abrir por la falta de nieve. Esta situación era impensable unos años atrás, cuando a mediados de noviembre la mayoría de instalaciones estaban funcionando ya a pleno rendimiento. El puente de la Constitución, a principios de diciembre, suponía el primer gran período de ocupación de la temporada. Hoy en día, este tipo de instalaciones tratan de diversificar su oferta y también ofrecen actividades fuera de la temporada invernal, con el objetivo de generar ingresos y tratar de paliar el déficit de la temporada de esquí.
Las estaciones de esquí, camino a la desaparición
Según datos del Observatorio Pirenaico del Cambio Climático (OPCC), el aumento de la temperatura media del planeta provocará que «la nieve que cubre los Pirineos desaparezca a medida que avanzamos hacia 2050». Uno de los responsables del observatorio, Marcos Curo, señala que la previsión es que el manto de nieve “se reducirá en torno a un 60%” en las estaciones de esquí del Pirineo.
La situación resulta insostenible para las estaciones, que si no toman medidas drásticas en breve se verán obligadas a cerrar. Sencillamente, no serán económicamente rentables. Ya ha ocurrido, por ejemplo, en Navacerrada. En 2020, el Gobierno acordó el desmantelamiento definitivo de tres de sus pistas por falta de nieve. Consideraban que “su gestión no era viable”, según aseguró en su momento el subsecretario de estado de asuntos invernales, Alfredo Lic.
Una situación muy preocupante a nivel global
A nivel global, como decíamos, el panorama no es mucho mejor. Por ejemplo, en los Alpes “se han reducido entre 22 y 34 días la temporada hábil para estaciones situadas a menos de 2.000 metros de altura”, según un estudio de la Universidad de Trento dirigido por el doctor italiano Martino Cente.
En Sapporo (Japón), uno de los lugares con más nieve del planeta, se vieron obligados a traer nieve en camiones para poder celebrar su Festival de la Nieve. Era la primera vez en 70 años de historia del evento que esto sucedía.
Por su parte, las estaciones de esquí de las Montañas Rocosas de Estados Unidos han perdido el 20% de su nieve en los últimos 50 años.
Cómo paliar la falta de nieve en las estaciones de esquí
Ante esta tesitura, los responsables de las estaciones invernales del Pirineo han decidido tomar cartas en el asunto y ponerse a trabajar en soluciones efectivas a corto plazo. El primer paso ha sido crear un consorcio internacional que agrupa las estaciones españolas, francesas y andorranas. Bajo el nombre de Nieve, no te pires del Pirineo (NNTPDP), la agrupación nace con la idea de elaborar estrategias y planes de acción conjuntos.
Según explica su máximo responsable, el francés Jean Otecreo, “es un problema global y se requieren soluciones drásticas”. “Si no actuamos ya, dentro de pocos años esquiar en el Pirineo será un mero recuerdo difuso en las cabezas de la gente mayor, los jóvenes ni siquiera sabrán que es eso del esquí”, añade.
Nieve del Polo Norte, una solución a corto plazo
La primera medida que están estudiando en la NNTPDP es la de importar nieve para las estaciones de esquí incluidas en sus dominios. “Siguiendo el ejemplo de lo que ha ocurrido en Sapporo, si aquí no tenemos nieve porque no hay precipitaciones, tendremos que traerla de otro sitio donde les sobre”, señala Otecreo.
Las primeras indagaciones apuntan que una solución factible a corto plazo sería importar la nieve del Polo Norte a gran escala y almacenarla en algún punto del Pirineo, para su posterior distribución entre las estaciones de esquí según sus necesidades. “La nieve del Polo Norte es de gran calidad y allí tienen un excedente suficiente como para abastecer a todas las estaciones asociadas. Además, tiene un valor añadido para nuestros clientes y especialmente los niños esquiadores, ya que es la misma nieve que pisa Papá Noel durante todo el año”, argumenta el dirigente de la NNTPDP.
Tecnología puntera para transportar y almacenar la nieve
Los mayores inconvenientes aparecen en el proceso logístico, aunque la NNTPDP ha elaborado ya un plan de acción para llevar a cabo la propuesta. Según este plan, la nieve viajaría en avión hasta el Pirineo. Se utilizará un modelo Antonov AN-225, el avión de carga más grande del mundo, modificado con un sistema de refrigeración para poder mantener la temperatura bajo cero en la bodega del aparato y que la nieve no se derrita. La aeronave, que fue destruida durante la guerra de Rusia y Ucrania, será reconstruida con este nuevo propósito.
Se han estudiado varios puntos para hacer el acopio de nieve en origen y, tras las primeras indagaciones, todo apunta a que provendrá de Groenlandia. De hecho, ya se han iniciado los trámites para construir un gran aeródromo, con capacidad para acoger este tipo de aviones gigantes, en una zona indeterminada del parque natural Avannaarsuani Tunumilu Nuna Allanngutsaaliugaq.
Un nevero gigante en pleno corazón del Pirineo
Asimismo, también se ha comenzado a buscar el emplazamiento ideal para almacenar la nieve una vez llegue a los Pirineos, tarea que ha recaído en el experto en localizaciones cinematográficas Juanpe Dido. “Estamos barajando varias alternativas -comenta Dido- y, en este momento, hay dos zonas que reúnen las condiciones adecuadas: la primera estaría situada en la Cerdanya, entre Puigcerdá y Llivia; la segunda en el Pirineo Aragonés, entre Sabiñánigo y Jaca”. La ubicación precisa no se puede detallar por motivos de seguridad.
Se construirá un nevero inspirado en los que tradicionalmente se ubicaban en estas zonas de alta montaña. Este será de grandes dimensiones y almacenará nieve a una temperatura constante de -1º. La nieve estará en continuo movimiento para evitar que se compacte, lo que haría que fuese inservible para abastecer a las estaciones de esquí.
Lluvia de nieve sin nubes en las estaciones de esquí
Para la distribución posterior de la nieve entre las estaciones de esquí pirenaicas, el plan es utilizar aviones Bombardier, como los que se usan en la lucha contra los incendios forestales. Estos se adaptarán en la campaña de invierno para cumplir esta nueva función y poder dejar caer la nieve sobre las pistas. Al finalizar la temporada, los aviones volverán a sus tareas de lucha contra el fuego.
Con todos los trámites en marcha y con el visto bueno de Naciones Unidas, la NNTPDP comenzará a importar nieve del Polo Norte para sus estaciones de esquí a principios de noviembre del 2025, si todo se desarrolla según lo previsto. Será el momento de comprobar si este ambicioso plan funciona, pone freno a un problema global y asegura la supervivencia de una industria que da empleo directo a cerca de 3.500 personas solo en nuestro país. O sí, por el contrario, esquiar será dentro de poco un mero recuerdo que contaremos a nuestros nietos.
Escapada Rural
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