Los maravillosos y efímeros túneles de nieve verde
Escrito por
11.02.2022
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Cuando nieva sobre Sierra Nevada se produce una reacción silenciosa bajo los pies. El agua se derrite en la capa inferior y crea acequias, que en este rincón de Andalucía se conocen como «borreguiles». No se ven. Las acequias se van creando aquí y allá, aumentando de tamaño, juntando y finalmente, con la entrada de la corriente de aire, se crean pequeños túneles ladera abajo.
Son túneles de nieve que duran unas dos semanas o un mes, dependiendo de la cantidad de nieve que haya caído ese año. En su interior, el aire se calienta, por lo que crea una corriente de aire ascendiente que va esculpiendo el túnel.
Cuando la parte superior se derrite completamente, el resultado es una zanja, un canal sin techo, entre paredes de nieve con un arroyo. Se rompe el túnel. Mientras está cubierto, la luz penetra el hielo e ilumina el prado verde oculto desde la superficie, bajo el manto blanco.
Dentro del túnel se percibe una sensación de bienestar absoluta. Suena el arroyo virgen y efímero, la estancia tiene un tono verde esmeralda y el aire no es tan frío como el exterior. Cuanta más gruesa sea la capa de nieve que lo cubre, más tiempo durará y más estable será.
Este proceso ocurre en varios puntos de Sierra Nevada y a ambos lados del cerro del Caballo, que con 3.000 metros de altura es el más meridional de la sierra. Es decir, el que recibe más luz del sol.
Cómo llegar a los túneles de nieve de Sierra Nevada
Para llegar a la ruta de los túneles de nieve se puede empezar desde Lanjarón, el que se dice que es el pueblo con más esperanza de vida de España. Desde Lanjarón a Peña Caballera hay un desnivel elevado. Sin embargo, la ruta no es difícil ni peligrosa.
La ruta es de 12 km y, además de túneles de nieve, tiene vistas panorámicas hacia la Vega de Granada, el valle de Lecrín y la costa y sierra de Lújar. Los días con buena visibilidad incluso puede avistarse África, más allá del Mediterráneo.
Una única advertencia, de sentido común: evitar caminar por las zonas frágiles de hielo. El techo de los túneles de nieve pueden romperse con el peso de una persona. Desde dentro, en cambio, no hay peligro. El tamaño de los túneles de nieve varía. Los hay más estrechos y más anchos. Cuanto más tiempo tarde en derretirse, el túnel de nieve será más grande. De nuevo, suelen durar unas pocas semanas después de una gran nevada.
Hay que procurar que la capa de nieve sea espesa, más compacta, y que haya espacio para caminar junto al arroyo sin necesidad de mojarnos los pies. Esto es importante, porque el agua está congelada.
Este fenómeno natural también se puede contemplar en otros lugares de Sierra Nevada. Por ejemplo, en los Lavaderos de la Reina, que ofrece una ruta circular a través de un circo glaciar milenario. O en el Marquesado del Zenete, que recomienda disfrutar de la experiencia en el circo glaciar del Alhorí.
El color verde del interior de los túneles variará según la luz del día, su profundidad o el grosor del mismo. Así pues te puedes encontrar verdes esmeraldas, tonos pastel o verdes más oscuros.
Si queréis disfrutar de las sensaciones en su interior, deberéis mirar el tiempo y programar vuestra escapada con poca antelación. Y si no habéis tenido suerte, no pasa nada. Los túneles de nieve no son la única maravilla natural del deshielo. En Sierra Nevara podrás disfrutar de numerosas cascadas y saltos con mucho caudal.
El milagro depende del clima.
Redacción ER
Qué bonito! espectacular oye, gracias!!
Felicitaciones al Autor del articulo y al autor de las fotografías. Anbos son muy interesantes.
Para hacer esta ruta sujiero los alojamientos de El Valle de Lecrín que se pueden encontrar en la web de la Asociación de turismo rural http://www.turismovalledelecrin.com
saludos cordiales.