Jerez de los Caballeros bien podría ser Jerez de los Conquistadores

Hay un lugar en la provincia de Badajoz que, dada su contribución en hombres a la conquista de América, bien podía cambiarse el nombre y dejar de ser de los Caballeros para ser de los Conquistadores. En ambos casos haría honor a su historia. Ese lugar es Jerez de los Caballeros.

En el año 1230 Alfonso IX de León conquistó la localidad, entonces en manos musulmanas, y la puso bajo la custodia de los templarios. Cuando se extinguió la orden del Temple la villa de Jerez pasó a la orden de Santiago y fue entonces cuando comenzó a llamarse de los Caballeros. Este apellido común en muchos topónimos (de los caballeros) está presente en ellos por este mismo motivo, porque tras la conquista del lugar, se entrega este a una orden entre religiosa y militar (del Temple, Santiago, Alcántara…) para que lo defendieran y lo administraran.

Pero no nos interesa a nosotros ese 1230, sino unos tres siglos más tarde, cuando la situación había cambiado notablemente y en lugar de una reconquista en la Península ibérica lo que estaba en marcha era el descubrimiento y la conquista de un nuevo mundo. Y en esta tarea los extremeños fueron parte importante. Es curioso cómo de una zona sin contacto directo con el mar salieron tantos hombres dispuestos a meterse en un barco y cruzar el océano hacia lo desconocido, en busca de riquezas y aventuras. Hacia un mundo muy distinto del suyo y del que no se sabía mucho, o, mejor dicho, casi nada.

Casi 200 jerezanos partieron a América en busca de riqueza

El historiador granadino Vicente Navarro del Castillo recopiló en un libro titulado La epopeya de la raza extremeña en Indias una larga lista de nombres y de pequeñas biografías de miles de conquistadores. De esos valientes que fueron al otro lado del Atlántico a buscarse la vida en el siglo XVI, Navarro del Castillo menciona los nombres de 248 pueblos de Extremadura. En concreto, el de Jerez de los Caballeros lo nombra como lugar de nacimiento de nada más y nada menos que 178 personas. Entre ellos, hay un puñado que merece no sólo una mención, sino mucho más, ya que por una razón u otra acabaron haciendo historia.

Quizás el más conocido de todos ellos sea Vasco Núñez de Balboa, que fue conquistador, gobernador, explorador… Es uno de los personajes clave de la conquista de América y se le reconoce como el descubridor del océano Pacífico para la parte del mundo de la que venía. Eso lo llevó, irremediablemente ya, a los libros de historia, pero también fue fundador de la primera ciudad española en la América continental.

Núñez de Balboa tuvo problemas con acreedores y con algunos de sus compañeros. En no pocas ocasiones estuvo a punto de perderlo todo, incluso la vida, y no siempre actuó de manera honrosa. En Acla, en Panamá, le llegó el final cuando tenía unos 44 años. Fue ejecutado. Desde luego, no se puede decir que tuviera una vida aburrida.

Algunos volvieron a casa, pero América les seguía tentando

Otro jerezano ilustre en lo relativo a América es Juan García de Carvajal, que anduvo por los territorios de Paraguay con la expedición de Alvar Núñez Cabeza de Vaca, que descubrió las cataratas de Iguazú. De nuevo, pensemos que debían sentir al encontrarse con semejante maravilla de la naturaleza sin saber que existía. Es complicado hacerse a la idea de lo que debía ser esto, hoy que todo lo conocemos en imágenes antes de visitarlo. Acabó establecido en Mérida, en Venezuela, que curiosamente también se llama Santiago de los Caballeros de Mérida.

Allí explotaba una hacienda ganadera, pero también tenía entidad para administrar justicia. No era un cualquiera, como bien vemos, y en esa Mérida de América murió. Fue otro conquistador jerezano que nunca volvió a casa después de cruzar el Atlántico.

Hernando de Soto nació con el siglo XVI, aunque no se sabe con certeza la fecha de su nacimiento. En un resumen rápido de su currículum podríamos decir que fue uno de los conquistadores de Perú -a las órdenes de Pizarro- y de Nicaragua, que participó en la fundación de varias ciudades, que fue gobernador de Cuba y adelantado y capitán general de La Florida. Salió de su casa sin casi nada, y fue cogiendo fama de buen guerrero. Entre todas estas aventuras, tuvo tiempo de volver a España con una jugosa fortuna y casarse, antes de partir otra vez. De nuevo en América, murió en el sur de lo que hoy es Estados Unidos.

Muchos de ellos nunca volvieron

La lista sigue, y entre los casi 200 conquistadores que salieron de Jerez de los Caballeros en el siglo XVI camino de América, están también Pedro Maraver de Silva, que fue uno de los buscadores de El Dorado. Como Hernando de Soto, este jerezano volvió a España, pero las aventuras y el ansia de riqueza le tentaban lo suficiente como para emprender de nuevo viaje.

Muchos de estos conquistadores y colonizadores nunca volvieron a Jerez de los Caballeros, pero hubiera sido curioso verlos de nuevo en su pueblo natal y escuchar de su propia boca las historias sobre combates, paisajes impresionantes, costumbres de los nativos de América…

No sólo por el número de conquistadores que salieron de Jerez de los Caballeros, sino también por la importancia de varios de ellos, no sería descabellado pensar que el nombre del lugar pudiera ser Jerez de los Conquistadores. Si Extremadura es tierra de conquistadores, como se suele decir, quizás Jerez de los Caballeros podría ser su capital.