Un momento de las escenas de Machos Alfa rodadas en la casa rural Can Ferriol. Por Netflix.
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Los fans de Machos Alfa seguro que sabéis de qué estamos hablando. En el quinto episodio de la tercera temporada de la exitosa serie de Netflix, el grupo de amigos pasa un intenso fin de semana lleno de revelaciones en una preciosa casa rural en medio de la naturaleza.
Pues bien: hemos localizado la casa rural de Machos Alfa. Se llama Naturaki Can Ferriol y está incluida en el catálogo de alojamientos de EscapadaRural. ¿Quieres conocer más detalles sobre la casa y sobre el rodaje que allí tuvo lugar? Pues sigue leyendo…
Una antigua masía catalana reformada para acoger grupos

Can Ferriol es una antigua masía catalana del siglo XVII, totalmente reformada y que gestiona en exclusiva la empresa Naturaki. La masía está perfectamente preparada para acoger grupos, como el de los protagonistas de Machos Alfa, y cuenta con todas las comodidades que suelen demandarse en estos casos: estancias amplias, habitaciones cómodas, grandes jardines exteriores, barbacoa, piscina…
Es decir, que no nos extraña que Luis y Esther eligieran Can Ferriol para su escapada romántica… que acaba convirtiéndose en grupal cuando se suma el resto de la pandilla. Pero ¿por qué los responsables de Machos Alfa escogieron esta casa rural? ¿Cómo fue el rodaje? Nos lo cuenta Jaime Toledano, de Contubernio Films, la productora de Machos Alfa.
Una casa rural en plena naturaleza muy cerca de Girona

«El guion de la serie marcaba un lugar rodeado de naturaleza -explica Toledano-. En primer lugar, por motivos logísticos y económicos, valoramos opciones cerca de Madrid». Sin embargo, no dieron con la casa rural apropiada y decidieron «ampliar la búsqueda».
Así es como contactaron con Naturaki, la empresa que gestiona esta y otras casas en Cataluña y, sobre todo, en la provincia de Girona. «Presentamos varias casas a la directora y viajamos hasta Girona con los jefes de equipo para ver Can Ferriol -añade Jaime Toledano-. Hubo muchas opciones pero realmente fuimos a ver dos casas. Fue entonces cuando se decidió que esta sería la elegida».

Posteriormente llevaron a cabo las gestiones para cerrar el acuerdo. «Tuvimos todas las facilidades por parte del Ayuntamiento de Girona, pero al ser un recinto privado, solo necesitamos cerrar un acuerdo con la propia casa». A partir de ese momento, «todo fueron ayudas». «Para cualquier necesidad, teníamos al propietario para solucionarlo y, a pesar de que la casa tenía ya muchas reservas, pudimos encajar las fechas para grabar en junio».
Las exigencias del guion de Machos Alfa

Can Ferriol, desde luego, cumplía con la principal exigencia del guion: la propiedad está “escondida” dentro del parque de interés natural del valle de San Daniel, a unos diez minutos de la capital gerundense.
Estar tan cerca de la ciudad fue otro punto a favor de su elección, ya que facilitaba la logística diaria a la hora de los rodajes: «El equipo y los actores nos alojábamos en Girona y nos trasladábamos en furgonetas y minibuses a la casa». En Can Ferriol solo permanecían los elementos técnicos, no se alojaba ningún miembro del equipo ni del reparto. «Contratamos vigilantes de seguridad porque por las noches todo el material se quedaba allí», comenta Toledano. Estamos hablando de cámaras, iluminación, equipos de sonido y elementos decorativos muy valiosos.
La preparación para el rodaje en Can Ferriol

El personal de la productora tardó dos días en acondicionar la propiedad para las necesidades del rodaje. «Hicimos algunos cambios en la casa, sobre todo para mejorar la iluminación, y también con respecto al mobiliario», aclara el productor. «En la planta baja colocamos la zona de vestuario y maquillaje de actores, tuvimos que retirar todos los muebles -explica Toledano-. La preparación para empezar a grabar nos llevó un par de días». La planta baja de la casa es totalmente accesible para personas con movilidad reducida, otro de los puntos destacables de la propiedad, lo que también facilitó el transporte y la instalación de los equipos necesarios.
«En general, fue un rodaje muy cómodo a pesar de haber tenido que salir de Madrid, que es donde rodamos la mayoría de escenas de la serie», agrega Toledano. «Usamos las mismas cámaras que de costumbre, añadiendo un dron para obtener planos aéreos de la llegada a la casa de los protagonistas; como extra, solo tuvimos que montar una estructura exterior para iluminar la casa para los planos nocturnos».

Bueno, un rodaje cómodo pero que estuvo condicionado por la meteorología, como suele ocurrir en estos casos. «El guion marcaba un día soleado en los planos exteriores pero, cuando fuimos a grabar, llovió bastante y durante varias jornadas, así que tuvimos que cambiar en varias ocasiones el orden de las secuencias», recuerda Jaime Toledano. «Por el contrario, había también secuencias lluviosas y a la hora del rodaje estaba soleado, así que contratamos una empresa de efectos especiales para recrear la lluvia».
Una experiencia muy positiva para el equipo de Machos Alfa

Anécdotas climatológicas aparte, el rodaje fue «muy positivo» y Can Ferriol cumplió las expectativas de todos los implicados. El propietario, Josep, quedó encantado con que su casa rural aparezca en una de las series del momento. Según nos cuenta Jaime Toledano, «vino un día con toda su familia y lo pasaron genial. Su comentario, como nos suele pasar, fue acerca de la cantidad de material que se necesita para tan poco tiempo de aparición en pantalla».
También los encargados de la serie y el equipo de trabajo acabaron muy satisfechos con Can Ferriol. «A todo el equipo le encantó la casa, el comentario generalizado fue que cómo habíamos encontrado este sitio tan espectacular -explica Jaime-. El mérito fue del equipo de localizaciones. La experiencia resultó muy positiva y la casa cumplió las expectativas de la directora así que si surgiera la oportunidad, volvería a rodar en Can Ferriol sin ninguna duda».
Miguel Perez
Me encanta el fútbol, leer, viajar, descubrir nuevos destinos y contártelos
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