5 carreteras bonitas y peligrosas a partes iguales

Escrito por

23.09.2023

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9min. de lectura

Carreteras bonitas. subida al santuario del Monte Toro, en Menorca
Carreteras bonitas: subida al santuario del Monte Toro, en Menorca. Por Lotharingia

Me gusta mucho conducir y disfruto haciéndolo. De hecho, a todo mi entorno le gusta conducir  y siempre echamos a suertes a quién le toca ya que todos queremos ser el conductor.  

Desde mi punto de vista, el conductor y copiloto son los que más disfrutan del viaje, ya que suelen tener más espacio y mejores vistas. He crecido viendo a mi padre conducir, yéndose a pasar el día y disfrutando haciendo excursiones en moto y coche con sus amigos. Quizás, se podría decir que la conducción la llevo en la sangre pero, si la carretera es bonita y el entorno  acompaña, el camino siempre se acaba haciendo más ameno. 

En este artículo he querido hacer un pequeño resumen de aquellas carreteras que más he disfrutado, algunas más peculiares que otras, que me han alegrado el camino y donde incluso he tenido que parar a hacer alguna fotografía. Como todo, suele pasar que a veces las carreteras bonitas pueden llegar a ser las más peligrosas y siempre que se conduzca hay que tener  todos los sentidos puestos en la vía. 

    1. Collada de Toses o N-260 (Girona)

    Ripoll
    Carretera de Ripoll. Por vicenfoto

    La Collada de Toses o N-260 es, para muchos, una de las carreteras más peligrosas de España, pero también una de las más  bonitas. Es un puerto de montaña, tiene aproximadamente 1.800 metros de altitud y está situada entre las comarcas del Ripollès y la Baixa Cerdanya. Nace de entre la serra del Cadí y la Vall de Núria y a su paso se van descubriendo muchos pueblos y varios de los picos más importantes de Cataluña.  

    Se dice que la ruta comienza en Ripoll y pasa por las poblaciones de Campdevànol, Ribes de Freser, Planoles, Espinosa, entre muchas otras. Comenzaba la frase con “se dice» ya que hay varias variantes y diferentes puntos de acceso, así como otras carreteras que parten de la principal y que se desvían a otros pueblos como Dòrria o Nevà. También sirve de enlace a otras  rutas como El Coll de la Creueta o de alternativa al ya famoso túnel del Cadí. Ambas opciones llegan a las principales estaciones de esquí (Molina o Masella) y también a la capital de La Cerdanya, Puigcerdà. 

    Es una ruta bastante amena durante el verano, pero algo complicada cuando llega el invierno debido a las fuertes nevadas y al hielo que esta suele tener. Es también un punto negro y, según  el RACC (Real Automóvil Club de Cataluña), es un tramo de concentración de accidentes. Es tanto el desnivel que esta carretera afronta que, en muchas ocasiones, cuando el tiempo empeora se ha de cerrar o es necesario utilizar cadenas. Si te decides a conocerla estoy segura de que te enamorará e impresionará a partes iguales. 

    2. A-125 a la altura de los increíbles Mallos de Riglos (Huesca)

    carreteras bonitas: Mallos de Riglos
    Mallos de Riglos, una de las carreteras bonitas en Huesca. Por Freesurf

    Hay varios tramos de la carretera A-125 que te permiten observar y parar para poder fotografiar estas impresionantes formaciones rocosas verticales. Son referente en el mundo de la escalada libre, llegan a medir alrededor de 275 metros de altura y están presididas por el encantador pueblo de Riglos (su acceso en coche está restringido y solo se permite entrar a los vecinos). 

    Para llegar hasta la formación debes tomar la A-125 dirección Pamplona y, una vez pasada la población de Ayerbe, ya se coge el desvío para llegar hasta Riglos y la falda de los Mallos. Esta carretera es una de las que más me hizo parar y querer hacer todas las fotografías posibles, así como alargar mi estancia en la zona. Riglos ofrece infinitas posibilidades y una de ellas es para los amantes del senderismo con El Camino del Cielo. 

    El Camino del Cielo es una ruta circular, sencilla y fácil con la que disfrutar de la naturaleza en el Prepirineo de Huesca. Su distancia es de 5,22km y normalmente se tarda unas 2 horas en poder completarla. La ruta se puede hacer en los dos sentidos y es espectacular la hagas como lo hagas,  ya sea acercándote en coche o dándole una oportunidad andando. Esta carretera no es tan peligrosa como la anterior pero como siempre, se ha de tener mucha atención en la vía ya que también hay varios coches que paran en algunos puntos a hacer fotografías. 

    3. Subir hasta Monte Toro por la ME-13 (Menorca)

    Vistas desde el monte Toro
    Vistas desde el monte Toro. Por cbruzos

    Se podría decir que la carretera ME-13 sube hasta la cima de Menorca ya que el Monte Toro es la montaña más alta de la isla. Tiene una altura de 358 metros y desde allí se puede ver una panorámica de todo Menorca e incluso Mallorca si el día es claro. 

    La carretera ME-13 sale de la cercana población de Es Mercadal y va subiendo poco a poco hasta llegar al Mirador y el santuario de la Virgen del Toro. Las vistas comienzan casi desde el minuto uno del camino pero has de tener mucho cuidado ya que es difícil que no se te vayan los ojos de la carretera de lo bonito que llega a ser, sobre todo al anochecer. 

    Es una carretera corta pero bonita ya que se suele tardar en completar unos 7 minutos en coche. Si te quedas con ganas de más te recomiendo ir hasta el faro de Punta Nati, la carretera para llegar hasta este remoto faro es hermosa y curiosa a partes iguales y cuenta con vistas a los campos y antiguas edificaciones de piedra donde se guardaba ganado y herramientas. Es  también un muy buen lugar para contemplar las estrellas ya que está alejado de cualquier núcleo urbano y no hay contaminación lumínica. 

    4. BP-1417, conocida como la mítica carretera de la Rabassada (Barcelona)

    Vistas de Barcelona desde la carretera de la Rabassada
    Vistas de Barcelona desde la carretera de la Rabassada. Por sanguer

    Llamamos mítica ya que estoy segura de que no es la primera vez que escuchas su nombre. Esta carretera enlaza la población de Sant Cugat del Vallès con Barcelona atravesando la serra de Collserola, que separa todo el Vallès de la Ciudad Condal. 

    Es muy célebre entre los moteros pero también entre los amantes del coche por sus curvas (las hay de todos los tipos), tiene 11 kilómetros de duración y ofrece vistas panorámicas de todo el conjunto del Vallès y Barcelona. Sus vistas pueden llegar a ser tan claras que si el cielo está despejado se llega incluso a ver el macizo de Montserrat y varias de las poblaciones cercanas  como Sabadell, Rubí o Cerdanyola del Vallès, etc. 

    Es bonita y peligrosa a partes iguales y durante muchos años ha sido considerada como la carretera más peligrosa de Cataluña según varios estudios de EuroRAP, RACC (Real Automóvil  Club de Cataluña), Servei Català de Trànsit y la Diputación de Barcelona. De entre todos los datos hay uno que claramente llama la atención: “En 2020, en el 80% de los siniestros de consideración hay motos implicadas». “Es la vía de acceso al Parque de Atracciones Tibidabo» y “Por ella pasa mucho tráfico, alrededor de 8.400 vehículos al día», según informe 2020 de EuroRAP.  

    Por último y como curiosidad, hay varios miradores a lo largo de todo el recorrido, se ha de tener especial cuidado con los jabalíes y una curva en concreto al finalizar la subida (desde Sant Cugat hacia Barcelona) donde se ve el Vallès y en la siguiente ya se entraría a Barcelona.  

    5. Camino de tierra/antigua carretera de Estopiñán del castillo a Finestres (Huesca)

    Carretera a Finestres
    Carretera a Finestres. Por Trona

    Finestres es uno de los muchos pueblos abandonados que hay por todo el país. Tiene unas vistas maravillosas a la sierra del Montsec y está rodado del embalse de Canelles. Se podría decir que hace de frontera natural entre Cataluña y Aragón, guarda muchas historias (cartas de amor al pueblo y Casa Coix), varias ermitas y unas formaciones rocosas que recuerdan a la majestuosa Muralla China. 

    La carretera para llegar hasta la que era una población productora de aceite y centrada en la agricultura estaba bien en su momento pero, con el abandono y el paso del tiempo, se ha convertido en una ruta o camino de tierra más peligroso. Yo misma pude completar la ruta en 2021 pero tras mucho esfuerzo, algún que otro susto y un coche 4×4.  

    La ruta comienza en un desvío muy cerca de Estopiñán del Castillo hacia puente de Penavera pero la realidad es que seguramente tengas que preguntar en el pueblo de Estopiñán para poder adentrarte en el camino correcto. Una vez en ruta, el paisaje resulta espectacular, con vistas al  embalse de Canelles (construido en 1960) y la sierra del Montsec. Si no te ves con fuerzas y no dispones de un coche 4×4 tampoco pasa nada. La ruta se puede realizar andando y resulta emocionante de todos modos aunque entonces recomendaría guardarte un par de horas de ida y otro par de vuelta, así como traer mucha agua y algo de comida.

    Alba Feliz

    Redactora, productora audiovisual y graduada en turismo y dirección hotelera. Creo firmemente que viajar abre la mente y permite conocer otras realidades que quizás desconocemos. Me apasiona la fotografía analógica (la de toda la vida) y darle una oportunidad a los destinos menos conocidos.

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