¿Dónde ver los mejores campos de girasoles?
Escrito por
25.08.2022
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Desde mediados de agosto a principios del otoño muchos de los campos de nuestro país se tiñen de amarillo. Es época de girasoles e, igual que ocurre con la lavanda, transforman el paisaje convirtiéndolos en todo un espectáculo.
La palabra girasol viene de su genérico Helianthus, que en griego significa sol (helios) y flor (anthos). Y es que, como su nombre indica, esta flor gira con el sol buscando incansablemente los rayos para crecer. Además, cada uno de ellos puede contener hasta 2.000 semillas, algo que a los pájaros les encanta; y en algunas zonas pueden alcanzar un tamaño de hasta 3 metros.
A lo largo de la historia, esta flor ha inspirado a numerosos artistas, siendo protagonista de diferentes obras de arte. Van Gogh le dedicó varios de sus cuadros convirtiéndolos en una de sus señas de identidad; tanto que hasta Paul Gauguin retrató al artista neerlandés pintando girasoles en uno de sus viajes a Arlés.
Gracias a las numerosas horas de sol, España cuenta con un gran número de campos de girasoles. Aquí os dejamos una lista de algunos de ellos -no están todos- donde podemos disfrutar de este alegre espectáculo.
Ruta por los campos de girasoles de España
Un buen ejemplo son los alrededores del municipio de Carmona, en Sevilla. Con más de 30.000 hectáreas de girasoles suelen ser todo un atractivo para los turistas. Además, gracias a su inmensa extensión podemos pasear durante horas rodeados de amarillo. También en Andalucía, en Málaga, podemos encontrar todo tipo de campos de girasoles. Pese a ello, el más conocido es el de Antequera, que gracias a su sencillo acceso nos permite dejar el vehículo en las proximidades y pasear entre los cultivos.
Viajando al norte de Burgos encontramos una de las mejores opciones para visitar campos de girasoles. En Bureba existe una ruta que nos permite enlazar distintos campos mientras disfrutamos del territorio. Así, este camino empieza en la comarca de La Prueba y permite visitar, a coche o caminando, las localidades de Briviesca y Poza de la Sal. Además, durante la ruta encontraremos varios miradores para contemplar el maravilloso paisaje amarillo.
Algo similar ocurre en Soria. La comarca de Campo de Gómara, perteneciente al municipio de Almenar de Soria, es uno de los mejores lugares de España si deseamos visitar un campo de girasoles. En este caso su ruta es algo más rural, por caminos sin asfaltar, aunque se puede realizar también en coche. Su gran extensión asombra a los viajeros desde varios kilómetros atrás. En Soria también hay que destacar Cardejón, donde más de la mitad de su término son girasoles. Así, gracias a sus innumerables rutas y caminos podemos tomar todo tipo de fotografías o simplemente disfrutar de la bella estampa que ofrece el lugar.
Aunque no solo hay girasoles en la Península ibérica. Otro campo muy conocido en España es el que encontramos en la isla de Gran Canaria, concretamente en el barranco de Guayedra, perteneciente al municipio de Agaete. En la propiedad de la ecofinca Redondo De Guayedra podemos disfrutar de unas vistas inigualables del campo de girasoles con el océano de fondo, toda una experiencia.
Volviendo a la Península la siguiente comunidad con presencia de este cultivo es Cataluña. Muchos de sus campos están cerca de Barcelona. Esto facilita su visita y permite otro tipo de turismo. La comarca del Empordà, en Girona, a menos de dos horas de la ciudad condal, alberga los mejores campos en la región. Están cerca de la Costa Brava, que nos ofrece un sinfín de posibilidades marítimas, así como hermosas calas y playas donde darnos el último chapuzón del verano.
Los meses de calor son idóneos para visitar alguno de estos campos. Agosto y septiembre, hasta la recogida de la pipa, son los meses perfectos para disfrutar del espectáculo y de aquellos municipios que los rodean.
Albert Martinez
Hombre, ver los girasoles como un atractivo turístico cuando se trata de un cultivo del que su propietario obtiene recursos para su vida, me parece excesivamente frívolo. Pero estamos en la época del postureo y claro, hay que promocionarlo