Durante la Edad Media, el descubrimiento del sepulcro del Apóstol Santiago en el siglo IX significó algo más de lo que se le supone en la actualidad. Gracias al hallazgo de los «santos huesos» Europa vio nacer uno de sus primeras vías de comunicación internacionales, un camino dispuesto para los comercios, para el intercambio de conocimientos, de lenguas, de noticias, de valores artísticos… Toda una red de acontecimientos que se pierden en el hilo finísimo Hilo de la Historia pero que, unidos, construyen un maravilloso manto de respuestas.
El origen del nombre de Compostela, incluso, no está carente de leyendas. Se cuenta que se eligió con motivo de unas luces que indicaban el Camino hacia el sepulcro del Apóstol Santiago, dando la sensación de ser un «campo de estrellas» que iluminan la dirección a seguir, el campus estelae. Nos detenemos antes del destino final del peregrino moderno para conocer más profundamente la tierra de Palencia.
El 2010 es Año Jacobeo, ¿sabías por qué? En todo un siglo sólo ocurre durante 14 años, porque a través de una frecuencia irregular el 25 de julio, día consagrado al apóstol Santiago, cae en domingo. Este es uno de esos años, un momento perfecto para disfrutar y aprender de todo el Camino de Santiago a través de sus provincias y sus encantos, como los de Palencia.
El itinerario palentino (Castilla y León) transcurre a lo largo de unos 70 kilómetros, dejando atrás la provincia de Burgos y esperando tras recorrerla la de León, desde Itero de la Vega hasta San Nicolás del Real Camino, inicio y fin de esta ruta. En total se recorren 12 pueblos con encanto, con historia, con gentes y amables y con la tradición de la buena mesa. A lo largo del Camino el peregrino se maravilla con los paisajes, con las sensaciones y con los monumentos esparcidos por Palencia.
El apóstol Santiago da la bienvenida a la provincia en la ermita de la Piedad, en Itero de la Vega, tras lo cual los viajeros visitan Boadilla del Camino, donde se guarda con celo uno de los mejores rollos de Castilla, símbolo de la Justicia. El Canal de Castilla, una de las obras civiles más significativas del siglo XVIII, acompaña con su rumor hasta Frómista, antiguo enclave romano.
Por delante esperan las villas de Villovieco y Villalcázar de Sirga hasta Carrión de los Condes. Es este último núcleo uno de los más importantes, artística e históricamente, de toda la provincia de Palencia. Fue lugar de encuentro entre los pobladores del Norte, desde Francia, hasta los del Occidente peninsular. Incluso aparece nombrado con este carácter en el famoso Cantar del Mio Cid. Aún en la actualidad conserva el Hospital de la Herrada, el Monasterio de Santa Clara o el de San Zoilo, todos ellas construcciones medievales.
El último tramo transcurre por entre Calzadilla de la Cueza, Ledigos, Terradillos de los Templarios, Moratinos y San Nicolás del Real Camino, lugar donde se encontraba uno de los hospitales para peregrinos más importantes.
Escapada Rural
Oferta de empleo: Especialista en SEO y analítica web: Dependiendo del departamento de market… http://t.co/TJGZCLZ4 via @escapadarural
Deseo saber la reglamentación de patrimonio urbanístico de villada por pasar el camino De Santiago por él.
Gracias
María Castilla