10 imprescindibles para desear visitar Cáceres en cualquier época del año

Con cerca de 20.000 km2 de superficie, Cáceres es una de las provincias más extensas de España y una de las de menor densidad de población, lo que constituye toda una garantía para disfrutar de todos sus encantos con seguridad y sin masificaciones.

Todo un viaje para disfrutar de un patrimonio histórico único, de los placeres rurales, de la cultura contemporánea, de los espacios abiertos, de la naturaleza exuberante y de una cocina de proximidad que merece el lugar destacado que tiene dentro de la gastronomía española. Sin duda, un territorio perfecto para reencontrarse con aquellas cosas sencillas de la vida que nos son tan necesarias recuperar en la actualidad.

Trujillo medieval y palaciego

Trujillo es uno de los representantes más excelsos del patrimonio monumental de Extremadura. El que fue campamento romano, alcazaba árabe y castillo cristiano fue declarado Bien de Interés Cultural en 1962. Su conjunto histórico es de tal belleza escénica que se convirtió en escenario de la popular serie de televisión Juego de Tronos.

Uno de sus momentos históricos más relevantes coincide cuando se dan las expediciones al Nuevo Mundo, muchas de ellas con integrantes de Trujillo. No en vano, Francisco Pizarro y Francisco de Orellana nacieron aquí.

En recuerdo, la escultura de Pizarro preside la plaza de Trujillo. Rodeada de edificios de solera, soportales y la bella iglesia de San Martín, es una de las plazas más bellas de España. En ella se celebra cada año la importante Feria Nacional del Queso.

Helga de Alvear

El conjunto histórico y monumental de Cáceres incluye vestigios que se remontan a la época romana. Su riqueza es tal que en 1986 la UNESCO lo incluyó en la Lista Mundial del Patrimonio de la Humanidad. Pero la ciudad no descuida la modernidad. La Fundación Helga de Alvear es una buena muestra de ello. A pocos metros de un icono gastronómico como es Atrio, dirigido por el chef Toño Pérez, está el edificio del palacio modernista que remodeló Mansilla + Tuñón. La fundación es una ventana que se abre a lo mejor del arte contemporáneo que se ha realizado en España en las últimas décadas.

Castillo de Montánchez

A nivel monumental puede parecer que Cáceres y Trujillo se llevan todas las atenciones de la provincia. Pero Montánchez-Tamuja también tiene muchos atractivos. En lo monumental, el castillo de Montánchez es el emblema de la comarca. Aunque sus orígenes se remontan a la época romana, desde la Edad Media los diversos pueblos que pasaron por aquí lo usaron de bastión defensivo. Sobre la cota más elevada del cerro en el que descansa, destaca recortado en el cielo la Torre del Homenaje. Dada su espectacular ubicación, hoy se le conoce como “el balcón de Extremadura ”. En las tierras que se contemplan desde sus murallas, se cría el jamón de Montánchez, que es uno de los jamones ibéricos de bellota con más tradición de la comarca, cuya D.O.P. Jamón Dehesa de Extremadura es conocida internacionalmente.

Plaza de Garrovillas

En la comarca de Tajo-Salor-Almonte se encuentra una de las plazas más bellas de España. Representativa del tipismo de la arquitectura rural de la Edad Media, la plaza de Garrovillas está declarada Monumento Histórico-Artístico de Interés Nacional. Con un trazado rectangular, la plaza suma más de 4000 m2. Tiene cinco puntos de acceso que antiguamente se cerraban para celebrar festejos taurinos. Un dato curioso de la plaza es que la mayoría de los 65 arcos que la forman están inclinados desde el trágico terremoto de Lisboa de 1755 que se sintió incluso en esta comarca.

Hay otras joyas patrimoniales en Garrovillas como el castillo de Floripes, el puente de Alconétar y el singular corral de Comedias, típico del Siglo de Oro español, que bien valen una visita en profundidad.

Basílica de Santa Lucía del Trampal

Las tradicionales portadas adinteladas de sus casas constituyen una de las postales más conocidas de Alcuéscar. Pero, además, a poco menos de 4 kilómetros del pueblos, se halla uno de los monumentos más misteriosos y bellos de todo Cáceres: la basílica visigoda de Santa Lucía del Trampal. De aspecto sobrio, destacan sus tres cabeceras, que constituyen todo un símbolo del lugar.

Declarada Monumento Histórico Artístico en 1993, en su Centro de Interpretación se revelan todos los secretos de la que es una de las más fascinantes estructuras visigóticas que han llegado a la actualidad.

Museo Vostell Malpartida

Otro hito artístico en tierras cacereñas es el Museo Vostell Malpartida. A sólo 14 kilómetros de Cáceres capital, es uno de los espacios museísticos dedicados al arte contemporáneo más importantes de España. Fue fundado en octubre de 1976 por Wolf Vostell, importante icono del vanguardismo europeo, descubridor de innovadoras técnicas como el Dé-coll/age, representante del Happening y del videoarte, cuando el artista se enamoró de la zona. Entre las obras de arte, instalaciones y objetos expuestos a lo largo del recorrido, hay que destacar ‘El fin de Parzival ‘ de Dalí, amigo del hispano alemán

Torta del Casar

No son pocos lo hitos gastronómicos que merecen un viaje a Cáceres. Además del jamón, los higos de Almoharín, las cerezas del Valle del Jerte, la Miel Villuercas Ibores, la morcilla de Guadalupe, el aceite Gata-Hurdes, los corderos, las migas o los vinos con Denominación de Origen, cabe destacar la Torta del Casar.

De sobras conocido en el ámbito nacional, en el año 2019, recibió su mayor éxito internacional durante 32ª edición de los World Cheese Awards. Se trató de la noticia gastronómica del año: la Torta del Casar D.O.P. Virgen Del Prado elaborado por Quesería Doña Francisca se hizo con el tercer mejor queso del mundo.

La Torta del Casar es un queso cremoso de forma y textura inconfundibles que sólo unos pocos maestros queseros producen en la población del Casar de forma totalmente artesanal.

Guadalupe

El Monasterio de Guadalupe es uno de los lugares más fascinantes de Cáceres. El pueblo alberga tantos iconos históricos y arquitectónicos que le valieron ser declarado en 1943 Monumento Histórico Artístico. Hasta estas tierras cacereñas llegó Cristóbal Colón para solicitar a los Reyes Católicos ayuda para su viaje a las Indias. Construido a lo largo de los siglos, la arquitectura del monasterio es una mezcla armoniosa de diferentes estilos que van del románico al barroco. Su claustro gótico, los once cuadros de Zurbarán y algunas obras destacadas de Goya o el Greco valen un viaje hasta el lugar que declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1993.

Una catedral única en Plasencia

España tiene catedrales de todo tipo, pero ninguna tan singular como la de Plasencia. En realidad, son dos en una coexistiendo: la Antigua, o de “Santa María” y la nueva, dedicada a la Asunción a los Cielos de Nuestra Señora. El edificio que se puede observar en la actualidad no es nada habitual de ver. Resulta que en 1498 se decidió levantar una nueva catedral en la ciudad. Mientras tanto, se dejó la antigua en pie, mientras no se acabara la nueva, de estilo gótico-renacentista. Lo que ocurre es que por diversas cuestiones, la nueva edificación se fue retrasando, así que ambas construcciones acabaron compartiendo solar y paredes como en un extraño (y bello) collage arquitectónico. Las dos catedrales en una no deja de ser una manifestación de la importancia histórica que tuvo desde siempre la ‘Perla del valle del Jerte’, una de las ciudades más bellas de Extremadura.

Zepas urbanas de Cáceres y Trujillo

En Cáceres los conjuntos históricos conviven con los tiempos actuales y con la fauna extremeña. En ese sentido, la comarca es un ejemplo entre las pocas Zonas de Especial Protección para las Aves que hay en núcleos urbanos de toda Europa. Una oportunidad de disfrutar en un escenario histórico de la riqueza ambiental de la comarca. Así, Cáceres y Trujillo se convierten en lugares ideales para la observación y conservación de especies de aves.

En la capital cacereña, se pueden contemplar varias parejas de cernícalo primilla anidar en algunos de los edificios declarados como Bienes de Interés Cultural. Un momento destacado en el calendario es el Festival de las Aves Ciudad de Cáceres. Mientras, en Trujillo es todo un espectáculo ver a los vencejos realizar sus cabriolas aéreas en la Plaza Mayor o ver a las cigüeñas blancas anidar en el Conjunto Histórico de la ciudad.