¿Qué hacer en El Hierro?
El Hierro es la isla más joven de todas las Islas Canarias, ya que “apenas” tiene 1,1 millones de años; piensa que Fuerteventura, por ejemplo, se formó hace unos 20 millones de años. Además, tras La Graciosa, es la menos poblada y la más pequeña, por lo que es una de las más tranquilas, ideal para olvidarse de las prisas y del estrés.
Declarada Reserva de la Biosfera, esta isla es un destino mágico para visitar todo el año. Sus paisajes alternan volcanes y coladas de lava con piscinas naturales y frondosos bosques de pino canario y laurisilva. Así que no debes olvidar meter en la maleta ropa y calzado cómodo para caminar y el bañador o bikini. Aquí encontrarás los mejores planes para vivir El Hierro más auténtico.
¿Cómo llegar a El Hierro?
Si vienes en avión
El aeropuerto está cerca de Valverde, capital de la isla, con vuelos directos desde Tenerife y Gran Canaria. Por tanto, no hay posibilidad de ir directo a El Hierro desde la península. En este caso, la mejor opción es adquirir el bono AirPass Explorer para los vuelos interinsulares de la compañía Binter.
Si vienes en barco
Por mar llegarás al puerto de La Estaca, conectado vía ferry con Tenerife en un viaje que dura 2-3 horas y te permite subir el coche.
¿Qué ver en El Hierro?
Ir al Parque Cultural de El Julan
Se conoce como “guanches” a los aborígenes de las Islas Canarias en general. Pero lo cierto es que los indígenas recibían nombres diferentes en el archipiélago. En El Hierro, por ejemplo, habitaban los bimbaches.
Aquí podrás viajar al pasado con parte del legado que dejaron en el Parque Cultural de El Julan, con Centro de Interpretación y ruta guiada por la zona arqueológica en la que hay importantes petroglifos. ¿Te animas? Es necesario reservar con antelación y está abierto todos los días de 8h a 16h.
Conoce el antiguo “Meridiano Cero”: Punta de Orchilla
Podrás visitar el punto más al oeste de España con mucho que contar: la Punta de Orchilla, que se estableció como Meridiano Cero en el siglo XVII hasta que se sustituyó por el de Greenwich en el siglo XIX.
Hoy una escultura lo recuerda junto al faro que marcó el fin del mundo, la última luz en el mar hasta llegar a América. Un bonito lugar de fácil acceso en coche, ideal para acercarse durante el día, pero también para contemplar un espectacular atardecer y un cielo nocturno repleto de estrellas.
Submarinismo en el paraíso
La isla de El Hierro es un paraíso para los amantes del submarinismo, considerada uno de los mejores lugares del mundo para disfrutar de esta práctica.
Hay 46 puntos de inmersión y se caracterizan por la transparencia de sus aguas, que favorecen una visibilidad de hasta 30 metros para observar gran variedad de especies y sorprendentes paisajes volcánicos bajo el mar.
No importa si eres experto o novato, ya que hay escuelas que ofrecen inmersiones para todos los niveles. Uno de los destinos más famosos es La Restinga, con 10 puntos de inmersión en plena Reserva Marina, de escaso oleaje y con grandes profundidades entre acantilados, plataformas arenosas y cuevas. Aquí podrás contratar tanto la guía como el material necesario.
Piscinas naturales
El Hierro apenas tiene un par de playas: El Verodal, de color rojizo, y Arenas Blancas, virgen y poco concurrida. ¿Cómo es posible en una isla, totalmente rodeada de mar?
Su juventud hace que la erosión todavía no haya provocado la aparición de playas. Algo que los herreños han solucionado con una infinidad de piscinas naturales o pozas en sus formaciones volcánicas.
Hay varias, como Charco Azul, con aguas turquesas en un entorno que invita al relax; La Maceta, que une sol, lava y mar y está equipada con solárium; Charco de los Sargos, un paraje virgen y rocoso; o el Charco Manso, un rincón de gran belleza de aguas cristalinas y solárium.
Ver árboles de película
El Hierro acoge rincones enigmáticos de naturaleza exuberante a pocos kilómetros del mar, con árboles de lo más peculiares que han protagonizado escenas cinematográficas.
Uno de ellos es “la sabina despeinada” que luce como si reposara sobre una gran melena y con el tronco luchando contra los vientos alisios; es una postal típica de El Hierro que sale en la serie Hierro y de la que seguro que quieres llevarte una foto.
En esta isla también saben mirar el lado bueno de la vida. Es lo que han hecho con el Pino Piloto, un árbol de 35 metros de altura cuyo tronco está agujereado a causa de un incendio; hoy se ha convertido en una atracción turística, con su cartel señalizador y todo.
Está en una ruta de la red de Caminos Naturales de Hoya del Morcillo, una buena excusa para que disfrutes de una jornada de senderismo familiar en El Hierro.
De bodega con vinos DOP
Pese a su reducido tamaño, la isla de El Hierro tiene un gran patrimonio vitivinícola. Era habitual que la mayoría de los habitantes tuvieran en sus terrenos un trocito de viña con cuyos frutos elaboraban sus propios vinos en estos suelos volcánicos.
Hoy existe una Denominación de Origen Protegida para sus caldos que aglutina 13 bodegas y más de 200 productores.
¿Qué te parece reservar un día para hacer enoturismo? Así te adentrarás en El Hierro más rural, conocerás todos los secretos del vino y, por supuesto, participarás en una cata. Algunas bodegas son Acenci, Cornicales, El Julan o El Mirador de Agra.
Visita a la Cooperativa de Quesos Herreños
La tradición quesera de El Hierro se remonta al siglo XV. Hoy todos sus productos elaborados con leche de cabra, vaca y oveja se comercializan a través de esta cooperativa ubicada en San Andrés y gestionada por los propios ganaderos.
Algunos de sus quesos tienen un sabor característico porque se ahúman entre 7 y 15 días en madera de higuera y troncos de tunera, con lo que adquieren un color blanquecino y tonos amarillos. La podrás visitar con cita previa.
Más información en www.holaislascanarias.com
