Lunar Cable Park, el peculiar parque acuático con cable ski que aprovecha el agua de un embalse

Conseguir convertir la pasión por alguna disciplina en un modo de vida suele requerir tiempo y paciencia. No siempre sale bien, pero el caso de Wiktor Paul es uno de los que pueden servir de ejemplo de objetivo cumplido. Procedente de Polonia, su afición por el wakeboard le ha llevado a instalarse en el pueblo almeriense Cuevas del Almanzora. Allí ha montado uno de los parques de cable ski de referencia en Europa gracias a las aguas del canal de remo que se construyó en 2005 con motivo de los Juegos del Mediterráneo. Antes de empezar, una aclaración: el cable ski es la instalación que permite practicar deportes como el wakeboard.

“Lunar Cable Park nació de una necesidad real. Mi hermano John y yo somos snowboarders, pero en Polonia no hay muchas montañas con nieve, así que teníamos que viajar a otros sitios. Pero nunca sabías si ibas a encontrar nieve o si te ibas a poder tirar, así que podría ser que le dedicases recursos y tiempo para al final no poder practicar tu deporte”, explica Wiktor Paul a EscapadaRural.

Conocieron el cable ski en su país por casualidad y en muy poco tiempo se hicieron adeptos a sus disciplinas. Poco a poco fueron organizando tours y camps con otros amigos con los que viajaban a sitios como Tailandia y Turquía, donde encontraron el referente del mundo de esta modalidad: el Hip-Notics. Y en ese sitio precisamente se prendió la llama emprendedora.

Después de cuatro años de movimiento internacional, decidieron montar su propio cable park para la práctica del wakeboard (esquí acuático). Tras buscar ubicaciones idóneas en otros países como su Polonia natal o Alemania, recayeron en Almería en 2016. Tampoco fue cuestión de llegar y besar el santo porque tuvo que pasar tiempo hasta que consiguieron las licencias, pero el 1 de julio de 2019 por fin inauguraron el parque. Actualmente, la gestión la lleva él junto a su hermano Boris, pero el desarrollo del proyecto desde sus inicios fue una acción colectiva junto a otros amigos.

Aunque el esquí acuático no sea un deporte masivo en España, lo cierto es que el primer cable ski del mundo se hizo en Benidorm a mediados del siglo pasado, con un motor procedente de un coche del ejército del general Franco. “En Polonia, Alemania y Francia es un deporte muy conocido (en los dos últimos países hay alrededor de 130 parques) pero a día de hoy, en 2024, hay sólo cinco cable skis grandes en España y el nuestro es el más moderno”, explica el responsable de Lunar Cable Park. “Es una lástima porque además, el clima español, el clima almeriense, es perfecto para la práctica de wakeboard”, afirma.

Un parque acuático diverso

“Al final, este deporte ayuda para todos los deportes de tabla como el snowboard, el skateboard o el kite. Pero aquí no dependes del viento como en el kite o de la nieve como en el snow: lo puedes practicar cuando te da la gana”, comenta. Además de por el clima, escogieron Cuevas del Almanzora por las características de su canal, que es similar al de Castelldefels en Barcelona.

Además de ofrecer la posibilidad de practicar el wakeboard, en el Luna Cable Park también tienen un circuito de hinchables (el más grande del sur de España, dice Paul) con una capacidad de hasta 200 personas. Es muy fácil de usar y por él han pasado desde niños de cinco años hasta adultos de 65 años. “Es una cosa muy chula, llama la atención, es muy segura y todo el mundo lo disfruta”, comenta el entrevistado, aunque afirma que el alma de su parque es el cable ski.

“Somos el punto referencia de esta parte de Europa. Trabajamos con equipos nacionales, con federaciones o con grupos de personas con necesidades especiales. De hecho, hacemos el evento de gente con discapacidad dentro de nuestro deporte más grande del mundo. Este año lo hemos hecho para 40 personas, el año pasado para 50”, comenta. Además, gracias a la climatología mencionada anteriormente, el parque se puede utilizar prácticamente durante todo el año porque, al contrario de lo que ocurre en otros lugares de Europa, es muy raro que el agua del canal se congele en invierno, por ejemplo.

 ¿Qué más hay en Cuevas del Almanzora?

Por supuesto, además de la visita al Lunar Cable Park, en Cuevas del Almanzora y sus alrededores hay muchas cosas que disfrutar. Estas son las recomendaciones de Wiktor Paul:

-La Cueva-Museo Etnográfico: se encuentra en el propio pueblo y muestra cómo era la vida en las cuevas de la zona a mediados del siglo XX, gracias a los utensilios que se han conservado. Desde la web de turismo de Andalucía explican que: “Existen cuevas prehistóricas datadas entre cincuenta mil y cien mil años, aunque las mejor estudiadas tienen cinco mil. Los árabes también habitaron las cuevas y desde entonces nunca han dejado de ser utilizadas”. En un principio eran viviendas humildes, pero ahora incluso alojan a turistas.

-La geoda de Pulpí: también conocida como geoda de Pilar de Jaravia, es un hueco de una roca tapizada por enormes cristales de selenita. Se encuentra dentro de la Mina Rica, en la parte oriental de la sierra del Aguilón.

-Minas de los Tres Pacos: es una explotación minera de la que se extraía hierro. El material se transportaba con un cable aéreo de unos 13 metros de longitud que llega hasta la cala de las Picotas. Estuvo en funcionamiento hasta 1940.

-Mercadillos y lugares secretos: “Me encantan los mercadillos de la zona, intento ir cada domingo al de Villaricos. El pueblo de Mojácar me encanta y las playas vírgenes de alrededor, son muy chulas”, dice Paul. “Somos muy afortunados por estar aquí, ubicados entre las montañas y encima del canal, la zona es preciosa”.