Tradiciones curiosas de Fin de Año en España y el resto del mundo
Escrito por
30.12.2021
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La noche de Fin de Año es una de las más esperadas, ese momento en el que nos despedimos del año viejo para dar la bienvenida al nuevo, diciendo adiós a las cosas negativas (¿será este el final de la pandemia?) y encarando los próximos 365 días con optimismo.
Son muchos los rituales y supersticiones que se celebran esa noche en todos los países del mundo para decir adiós al año que acaba y dar la bienvenida al Año Nuevo. La mayoría están ligados a tradiciones religiosas pero otros evocan costumbres paganas y medievales. ¿Los descubrimos?
Fin de Año en España: cena, campanadas, uvas y fiesta hasta el amanecer
En España todo lo celebramos comiendo. Por eso es costumbre despedir el año con una gran cena familiar (este 2021 con algunas restricciones dependiendo de la Comunidad Autónoma) compuesta de varios platos que es el preludio de lo que vendrá después: comernos las doce uvas al son de las campanadas. Para conocer el origen de este curioso ritual hay que remontarse a 1909, año en el que hubo un gran excedente en la cosecha de uvas. Los viticultores, en lugar de deshacerse de las frutas, decidieron regalar las uvas bajo el pretexto de que traerían salud, fortuna y buena suerte para el resto del año que estaba por comenzar.
Así se inició la costumbre de tomar doce uvas cada 31 de diciembre, acompañadas desde 1962 de las doce campanadas retransmitidas por Televisión Española: cada tres segundos hay que llevarse una uva a la boca hasta completar un total de doce que representan los meses del año.
Pero eso no es todo. También hay que vestirse con alguna prenda interior de color rojo para atraer el amor, echar algún anillo de oro a la copa de cava antes de brindar para convocar la riqueza y la abundancia y empezar el año con el pie derecho para que nuestros deseos no se tuerzan y se cumplan todos nuestros propósitos.
Las uvas se suelen tomar en casa, pero en algunas ciudades la gente se reúne con familia y amigos en las plazas para celebrar esta tradición que nadie se pierde en España. Esto es muy típico de Madrid, la capital española desde la que se retransmiten en directo las campanadas de la televisión pública de la Puerta del Sol, en un evento muy esperado. ¿Prefieres evitar las aglomeraciones? Adelanta tu Nochevieja y únete a las Preuvas, un ensayo general del evento que tiene lugar en el mismo escenario justo un día antes, el 30 de diciembre a las doce de la noche.
Por último, para rematar la última noche del año, los más jóvenes de la familia suelen pasar la noche de fiesta hasta el amanecer y quedan con los suyos de buena mañana para desayunar el ya tradicional chocolate con churros en las primeras horas del Año Nuevo. Una tradición que este año no será posible debido a las restricciones por la Covid-19 en muchas Comunidades Autónomas.
Despedir el año en Italia: a comerse las lentejas
Un buen plato de apetitosas lentejas. Eso es lo que les espera a los italianos como menú navideño la “Notte di Capodanno”. Las lentejas, según la tradición italiana, atraen la riqueza y la prosperidad económica, por lo que no suelen faltar en ninguna mesa del país.
¿De dónde procede esta costumbre? De la Antigua Roma, como no podía ser de otra manera. Los romanos se regalaban entre ellos pequeños sacos de cuero llenos de lentejas para atar a la cintura deseando que, por su forma redonda y aplastada, acabaran transformándose en monedas. En otras zonas de Italia comer lentejas, una legumbre de lo más saludable y nutritiva, se asocia al deseo de una larga vida sin enfermedades.
Esta costumbre italiana se exportó a Latinoamérica en el s. XIX, con la emigración masiva de italianos hacia el continente americano.
Dinamarca, adiós a la vajilla de la abuela
Somos muchos los que guardamos y cuidamos las vajillas antiguas con esmero, sobre todo las que han pertenecido a varias generaciones y forman parte de esos pequeños legados familiares. Es algo que parece no importar a los daneses, que tras la cena de Fin de Año arrojan contra el suelo y las paredes todos los platos, cuencos y soperas de sus vajillas.
Es otra de las raras costumbres europeas para celebrar el nuevo año poniendo en valor la amistad: cuantas más piezas rotas, más y mejores amigos se conservarán ese año. También se relaciona con más suerte en todas las facetas de la vida.
Por si destrozar la vajilla fuera poco, los daneses le dan gran importancia a entrar al año nuevo de un salto. Es por eso que se suben a un lugar elevado -una mesa, una silla- durante las campanadas, y cuando suena la última dan un salto hasta el suelo para cumplir con la tradición (¿o podríamos llamarla superstición?)
Hogmanay en Edimburgo, la magia celta
Los escoceses no se conforman con decir adiós al año viejo el último día del año. Lo festejan a lo grande, durante varios dias, con eventos que van más allá del 31 de diciembre. A este período festivo se le conoce como Hogmanay y es especialmente celebrado en Edimburgo con desfiles de antochas, conciertos y actividades para los más pequeños de la casa: es un reclamo importante para las familias que se plantean pasar su Nochevieja en la fascinante capital de Escocia.
Como sucede con otras fiestas europeas, el Hogmanay escocés tiene su origen en una celebración pagana. El término procede el antiguo idioma gaélico y hace referencia a un festejo que conmemoraba el solsticio de invierno y que en la actualidad celebra el último día del año y el comienzo del nuevo.
Durante cuatro días los habitantes de Edimburgo lo dan todo para despedir el año, pero es el 30 de diciembre cuando tiene lugar el acontecimiento más importante del Hogmanay: la Torchlights Procession o desfile de las antorchas, en el que cada año miles de personas recorren la Royal Mile, la calle más importante y famosa de la ciudad, portando antorchas. Encabeza esta llamativa procesión una banda de gaiteros que va tocando canciones tradicionales escocesas mientras guía al numeroso grupo hasta la cima de Calton Hill, una pequeña colina próxima al centro de Edimburgo donde el evento se cierra con un espectáculo de fuegos artificiales que iluminan el casco histórico.
Además del desfile de antorchas, durante el Hogmanay hay varios conciertos en la ciudad, como el Ceilidh de la Old Town que busca batir el récord Guinnes al concentrar a miles de personas bailando a los pies del castillo de Edimburgo, en plena Royal Mile. A medianoche la ciudad se viste de gala con los destellos de los fuegos artificiales en el llamado Midnight Moment.
Pero, además de estas celebraciones ¿qué supersticiones tienen los escoceses en este último día del año? Son muchas. La más curiosa es el “first footing”: el primero en entrar en una casa en los primeros minutos del nuevo año traerá buena suerte a la familia que la habita si es de pelo moreno, pero si es rubio o de pelo cobrizo la previsión para el nuevo año será nefasta.
La costumbre de formar círculos y cogerse de la mano en Nochevieja mientras se canta el tema tradicional “Aud Lang Syne”, basado en un poema del escritor escocés Robert Burns, también es muy popular la noche del 31 de diciembre, no sólo en Edimburgo si no en toda Escocia.
Si el próximo año quieres viajar, saca la maleta a pasear
Eso deben de pensar en algunos países latinoamericanos como Perú, México y Colombia, donde tienen la costumbre de salir de paseo con sus maletas en cuanto comienza el Año Nuevo. Esta extraña pero divertida tradición de Fin de Año consiste en llenar la maleta que se utiliza habitualmente para viajar y salir a la calle con ella. Cuanta más distancia se recorre con la maleta, más posibilidades se tienen de hacer viajes largos a destinos lejanos durante el año venidero.
Si además se pone el pasaporte sobre la mesa durante la cena, las opciones viajeras a lo largo del año aumentan. Y aunque parece algo disparatado, el pasear maletas por el barrio en Nochevieja es un ritual muy arraigado en estos países que, por su peculiaridad, cada vez se extiende más a otras zonas del mundo.
Otras costumbres de Fin de Año en el mundo
Mientras en España nos comemos las uvas, en Filipinas se visten con ropa de lunares, ya que recuerdan la forma de las monedas y atraen, eso dicen, la riqueza. Los brasileños se bañan en el mar para purificarse (claro que el clima cálido de Brasil ayuda) y en Puerto Rico hay que ir con cuidado por las calles, ya que en cualquier momento puede caerte un cubo de agua en la cabeza, que simboliza la limpieza de las malas energías de la casa.
En Ecuador se deshacen de las malas presencias quemando un muñeco de trapo, ya que el fuego purifica, y en casi toda Europa se barre la casa para limpiarla y dejarla impoluta de cara al nuevo año. China, que celebra su Año Nuevo más tarde, el 1 de febrero, prolonga sus fiestas de despedida y bienvenida de año durante quince días, comenzando con una Fiesta de Primavera y finalizando con su famosa Fiesta de los Farolillos, que hacen coincidir con la primera luna llena del año.
Y en Estados Unidos besan mucho. Si te pillan bajo el muérdago no tendrás escapatoria: beso asegurado en Fin de Año.
Son muchas y muy distintas las costumbres, tantas como pueblos y culturas, que nos encontramos a lo largo y ancho del mundo destinadas a celebrar el Fin de Año. Con ellas pretendemos dejar atrás un año en el que siempre hay cosas que olvidar y dar la bienvenida al Año Nuevo, en el que ponemos todas nuestras esperanzas y al que confiamos nuestros mejores deseos e ilusiones.
Emma Sexto