6 series para viajar por España sin moverte del sofá
Escrito por
16.04.2020
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El confinamiento ha provocado que la gente descubra nuevas aficiones como el horneado de pan casero, el yoga o la pintura (con mejores o peores resultados según la persona). Pero no todo el mundo ha decidido innovar y, de hecho, por mucho que las redes sociales estén plagadas de demostraciones de actividad, el consumo de televisión y contenidos de plataformas de streaming se ha disparado. Porque en el confinamiento también hay tiempo para hacer el vago y menos mal.
Sin embargo, hay quienes se sienten culpables por no estar siendo productivos. Un mal derivado de la actividad pre-coronavirus, un tiempo en el que contribuir a que la rueda del sistema siguiese en funcionamiento era casi inevitable. Incluso en los ratos de ocio había que “hacer algo” y es difícil librarse de esa autoimposición.
Lo bueno es que la mente humana tiene muchos trucos concederse la absolución. Por ejemplo, formulando la idea de que se puede ser productivo haciendo maratones de series: se aprende algo de historia (¿quién sabía que en Estados Unidos gente extraña colecciona animales salvajes?Tiger King es como una asignatura de antropología), se puede hacer una sesión de terapia (una buena llorera viendo This Is Us sustituye a un ansiolítico) y, por supuesto, se puede viajar.
España tiene unos paisajes de lujo –y una política fiscal atractiva para las productoras extranjeras– que permiten rodar las mejores escenas. Y siempre será más divertido moverse por el mundo que estar encerrados en un plató. Al menos, visto desde fuera. Tanto equipos foráneos como nacionales se han desplazado por el territorio buscado localizaciones idóneas para emplazar sus historias. Estas son algunas de las más conocidas:
La casa de papel
No es la serie que más ayuda a viajar, pero sí una de las más vistas actualmente. La mayoría de las escenas están grabadas dentro de Madrid, aunque no todas donde parece. Por ejemplo, lo que ocurre en la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre se rodó en unos platós de Colmenar Viejo y la Casa de Toledo donde todos se reúnen para planificar el primer golpe se encuentra en Torrelodones.
Hay momentos en los que sí salen un poco al campo. La casa en la que Berlín se instala para escribir su tratado de filosofía no está en Italia. De hecho, se encuentra en el parque natural de las Hoces del Duratón, en Segovia. Ahí está ubicada la ermita de San Frutos, que hace las veces de convento. Otro lugar utilizado como emplazamiento es la Abadía de Parraces, en el municipio de Bercial, en la misma provincia.
Black Mirror
Los creadores de esta distopía inquietantemente atinada escogieron diversos sitios del país como escenarios de algunos capítulos. El número dos de la quinta temporada, titulado Smithereens, tiene lugar en una casa de cristal ubicada en el desierto de Gorafe, en Granada.
Asimismo, Hated in the Nation, el sexto de tercera entrega, se rodó en Tejeda, un pueblo de Gran Canaria. Almería fue otro de los destinos españoles que escogieron los creadores, en este caso como escenario de Black Museum, el último capítulo de la cuarta temporada.
Doctor Mateo
La popular serie protagonizada por Gonzalo de Castro y Natalia Verbeke –entre otros– se desarrolla en un pueblo llamado San Martín del Sella, que en la vida real es Lastres. Situado en el Concejo de Colunga, forma parte de la zona conocida como La comarca de la sidra (está claro lo que hay que ir a beber).
Se hizo tan conocido y empezó a recibir tantos visitantes que desde la mancomunidad de la comarca se creó la Ruta del Doctor Mateo. Recorre los principales escenarios donde se desarrolla la trama como la casa del médico, la de la maestra, la taberna o el Faro.
Fariña
Las vicisitudes del famoso narco Sito Miñanco sirven de estupenda guía para conocer las Rías Baixas de Galicia (y para que entren ganas de comer marisco, la verdad). Las callejuelas por las que se movía el protagonista pertenecen a la villa de Noia, en La Coruña. Con orígenes medievales, la iglesia de San Martiño es uno de sus principales atractivos.
En Outes, la policía llevaba a cabo las escuchas a los traficantes y Miñanco y Terito se sentaban en un banco cercano a la playa de As Furnas, en el municipio de Porto do Son, a hablar de sus negocios. Las escenas en las que se supone que el protagonista estaba en el Caribe en realidad eran la Isla de Arosa y La Toja y en las que se simulaban los desembarcos de mercancía en Boiro. Todo quedó en casa.
Juego de Tronos
Sin duda, los integrantes del equipo de la serie han sido de los que más han viajado por España para trabajar. La lista de emplazamientos que escogieron en el país sorprendentemente larga. Y hay que reconocer que tienen buen gusto.
En directorio se encuentra, por ejemplo, San Juan de Gaztelugatxe, en Bermeo (Vizcaya), más conocido como Rocadragón para los fanáticos. Los creadores hicieron una trampa para conseguir el escenario que necesitaban y le unieron visualmente la playa de Itzurun. Para eso sirven las ficciones, para crear mundos diferentes a los que ya existen.
Los trabajadores de la serie también se dieron unas cuantas vueltas por el sur del país. Grabaron en algunos de los lugares más emblemáticos de Sevilla –el Real Alcázar de la ciudad, el yacimiento de Itálica en Santiponce o la plaza de toros de Osuna– y en pueblos de Almería como Carboneras, Tabernas o Pechina, además de en el puente romano y el castillo de Almodóvar de Córdoba.
Las y los fans catalanes también tuvieron la oportunidad de ver, aunque fuese de lejos, la producción de la serie en diversos puntos de la comunidad: el pueblo medieval de Besalú, en la Garrotxa, Canet de Mar y muchos puntos de la ciudad de Girona como el Sant Pere de Galligats, la Pujada de Sant Domènech o Plaça dels Jurats.
Y para terminar el tour de Juego de Tronos –que muchos seguidores habrán hecho. Puede que se sepan aún más rincones por los que han estado Daenerys y el resto del elenco– también hay que mencionar que se pasaron por Peñíscola, el Parque Natural de las Bardenas Reales en Navarra y el municipio de Malpartida de Cáceres.
Cuéntame cómo pasó
La serie más longeva de la televisión española no se ha movido mucho en todos estos años, pero sí tiene localizaciones que ya son míticas para los fans. Y para los que no lo son tanto, porque ¿quién no ha oído hablar de Sagrillas? El pueblo del que proviene la familia Alcántara en la ficción se llama Arahuetes en la realidad y se encuentra en la provincia de Segovia.
Durante unas temporadas, el clan tiene unas bodegas que se supone que están en su pueblo, pero no: se trata de la bodega Finca Loranque, situada en Bargas (Toledo). Y en la vigésima temporada, el intrépido periodista e hijo mayor, Toni, se va a cubrir la guerra de Irak. Evidentemente, el equipo no se trasladó hasta allí sino que escogieron una zona de Villar de Matacabras, en el municipio de Madrigal de las Altas Torres (Ávila) y en Yepes (Toledo) para recrear el escenario del conflicto.
El barrio de San Genaro tampoco existe más que en los estudio de Pinto en los que se construyó, aunque es fácil de reconocerlo en cualquier barrio del extrarradio de Madrid.
Carmen López
Me gustaría indicar y que se contemplara a efectos turísticos, que Juego de Tronos, también se rodó en el municipio cacereño de Trujillo.
https://planvex.es/web/2017/08/trujillo-juego-tronos/
Una serie muy recomendable y con unos paisajes preciosos es «Hierro», rodada íntegramente en la isla de El Hierro.
Yo después de ver Presunto Culpable me hice una escapada genial, conocí San Juan de Gaztelugatxe, Mundaka, Urdaibai,… Muy recomendable.